Sobre Triste y Solitario y Final, Novela Policial De Osvaldo Soriano

Ensayo Literario: “Venganza de Triste, solitario y final: La risa es la puerta por donde salen los tiranos”.

Autora: Gretel Rafuls Trujillo (23 años)

Triste, solitario y final (1973) forma parte de la impronta del subgénero neopolicial dentro de esa gran reacción ante el boom, que constituyó el postboom en la literatura hispanoamericana. Diversas son las visiones de escritores y críticossobre el momento que contextualizó el inicio de esta nueva estética-sensibilidad literaria contracorriente del boom. Muchos coinciden sin embargo, en que es reflejo de un contexto histórico convulso, marcado por la bancarrota de las democracias en América Latina que desembocó en atroces dictaduras militares, por el fracaso de los movimientos de izquierda en lo cual destaca el asesinato de ErnestoChe Guevara y por el quebranto del paradigma lineal histórico del progreso social.

Para Donald Shaw L., quien sistematiza la visión de otros creadores, el alba del postboom pudiera estar marcada por la primera novela de Skármeta, Soñé que la nieve ardía en 1975 o por el primer incuestionable triunfo editorial de Isabel Allende con La casa de los espíritus en 1982. En lo que sí existe un mayorconsenso es en la valoración de que los autores del postboom no han vuelto hacia un realismo ingenuo: como si el escritor pudiera observar e interpretar la realidad, pero a sabiendas de las dificultades conectadas con el realismo viejo estilo. (Shaw, 1999:260)

De las características que Antonio Skármeta enunció para la novela de sus contemporáneos (la novísima narrativa), la obra que nos ocupa esreferente de la exuberancia vital, la espontaneidad, la cotidianidad, la fantasía, la coloquialidad y la intrascendencia.

Ese talante desacralizador le mereció al postboom los títulos endilgados por diversos autores como “los contestatarios del poder”, “la poética de la mediocridad” o “la estética de la transgresión”. Con este ensayo nos proponemos evidenciar algunas de las características másnotables del postboom literario en Hispanoamérica presentes en esta primera novela de Osvaldo Soriano, particularmente las asociadas al neopolicial y la novela negra.

Como dijera el maestro Jorge Luis Borges: El género policial, como todos los géneros, vive de la continua y delicada infracción de sus leyes. (Noguerol, en digital: 2010). Es así como los autores de esta revisitación delpolicial, transgreden la estética de los canónicos Edgar Allan Poe, Arthur Conan Doyle y Agatha Christie, con una parodia de las fórmulas clásicas del género policial.

La impronta de la realidad; la relegación del enigma a un segundo plano; la ley y la sociedad como responsables del crimen; el reflejo de la cultura de masas[1]; la primacía de “los otros” en el relato, en tanto los autores no solo danvoz a los detectives, sino que penetran en el universo de las víctimas y los criminales a través de ellos mismos; la metaficción y la verdad como construcción escurridiza, son algunas de las marcas más frecuentes en el timbre de este subgénero emergente.

Esa metaficción postmoderna profundiza la quiebra de nuestro ya decadente sentido de realidad y contribuye a la asunción de la construccióndel universo como una práctica discursiva. Al dinamitar el binarismo tradicional que asumimos como hábitus, logra desnaturalizar el lenguaje, el entorno, la estructura del tiempo, nuestra experiencia vital, nuestra cosmovisión y sensibilidad, las racionalidades humanas, e incluso, la narración literaria como forma de representación. Al respecto, Catalina Gaspar, profundiza: Parecería que lapreeminencia de determinadas perspectivas teóricas es tal que termina por someter a la literatura, paradójicamente, a cánones que busca refutar, en tanto que la producción literaria misma genera, metaficcionalmente, nociones teórico- críticas otras. (2001:10)

Como consecuencia, se subvierten constantemente los clásicos pactos que norman la relación entre autor y receptor, para romper con la retórica...