Sobreviviente Amazonas
Genaro Matute M., Ph.D.
Una tarde de Julio en el Amazonas, se inició repentinamente una fuerte tormenta que
vino acompañada de vientos huracanados y una repentina crecida del río. “La Perla de
la Selva”, un hermoso barco de paseo con unos 60 pasajeros, muchos de ellos turistas de
todo el país y algunos extranjeros se encontró repentinamente envuelto en unatremenda
correntada. La tripulación desesperadamente trataba de mantener el barco estable. El
capitán, un viejo marino alemán que había decidido irse a vivir a la selva después de la
segunda guerra, luchaba incansablemente con esa extraña fuerza de la naturaleza.
Decidió acercarse a la orilla para que en caso de que pasara lo peor se pudiera encontrar
rápidamente con tierra. En ese intento sucedióla tragedia y sin darse cuenta el barco se
encontró con la orilla, recientemente cubierta por la subida de las aguas del río, y
después de encallar en forma directa, por la velocidad que traía se levantó la parte
trasera casi cinco metros, quebrándose el barco en dos al caer, saliendo despedidos
todos los pasajeros, la gran mayoría hacia el río perdiéndose en sus corrientes gran parte
de losmismos.
Un pequeño grupo, entre los que estaba usted mismo, salió despedido hacia un islote y
por suerte quedaron momentáneamente a salvo. Después de pasar una hora, cada quien
por su lado, se le ocurrió buscarlos y reunirlos para conocerse y planificar como se iban
a organizar. La lluvia no paraba, y evidentemente, el islote iba a ser cubierto por las
aguas en unas cuatro horas. En totaleran diez personas todos con golpes y contusiones
aunque alguno estaba en peores condiciones.
Dos de ellos eran nativos, Carlos y Enrique. Carlos, de unos 40 años, era tripulante de la
nave, y usted lo había visto tomando licor de una chata que guardaba en el bolsillo
trasero del pantalón. Pesaba unos 100 kilos y decía que no le había pasado nada con el
accidente, aunque cojeaba un poco alcaminar, tenía un genio fuerte y no dejaba de
expresarse con groserías respecto de lo ocurrido. Enrique era un muchacho de unos 19
años, muy delgado y con unas extrañas marcas en la piel. Se notaba que había perdido al
menos dos dedos de la mano izquierda. Aparentemente no ha tenido mayor
consecuencia en el accidente, pero su ánimo estaba muy decaído.
Una de las personas que estaban en el isloteera Ulrica, una señora de unos 60 años, de
profesión médico y de nacionalidad sueca. Había venido en un grupo de turistas
observadores de pájaros. No habla una sola palabra de español, pero desde el primer
momento se puso las pilas y ayudaba a quien tuviera consecuencias. Habían tres
mujeres más: Isabel, Lolita y Fernanda. Isabel era profesora de primaria, 45 años, muy
citadina, y algo subidade peso, educada y madre de dos hijos. Había venido con su
esposo a pasar una segunda luna de miel. Su esposo se perdió en la corriente del
Amazonas. Se quejaba de dolores en las piernas. Lolita, por otro lado, era una joven de
16 años, basketbolista del colegio y brigadier de su promoción. Cursaba el último año
de estudios y este era un viaje que hacía con sus padres antes de salir delcolegio.
Fernanda, una mujer negra de unos 45 años, trabajaba como empleada con una familia
que se perdió toda en la corriente. Tenía un fuerte golpe en la frente y una herida en la
ceja, la que no paraba de sangrar.
Este ejercicio ha sido preparado por el Profesor Genaro Matute M. No pretende indicar mejores o peores formas de
actuar. Lima, 2005. Derechos Reservados. Esan, Perú.Sobrevivientes del Amazonas
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Los otros tres sobrevivientes eran David, Rafael y Ramón. David era un judío
venezolano de unos 28 años, exmiembro del ejército israelita y era el que en peor estado
físico se encontraba. Tenia rotos una pierna y el brazo izquierdo. En un primer momento
quiso asumir el liderazgo para salir del problema, pero el dolor no le permitía
mantenerse compuesto por mucho rato,...
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