Social
En 1961, Violeta viajó a Argentina, donde vivió en General Pico y Buenos Aires y en junio se reunió en esta última ciudad con sus hijos Ángel e Isabel ysu nieta Tita para embarcarse rumbo a Helsinki (Finlandia) para participar en el VIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes. Después, recorrió la Unión Soviética, Alemania, Italia yFrancia, donde se instaló en París. Allí cantó en el Barrio Latino y dio recitales en Teatro de las Naciones de la Unesco, actuó en radio y televisión junto a sus hijos, bordó arpilleres e hizo esculturas enalambre.
Además de lanzar al mundo del disco a sus hijos Ángel e Isabel, con el mote de Los Parra de Chile, continuó sus grabaciones con el LP Recordando a Chile, también conocido como Una chilenaen París, que incluyó dos canciones compuestas y cantadas en francés, así como también otros temas muy importantes de su carrera, como «Paloma ausente» y «Arriba quemando el sol»; asimismo, en 1962grabó para el sello Arión una serie de canciones editadas en diversas recopilaciones posteriores. Fue una etapa de gran nostalgia, tal como lo atestiguan canciones tan sentidas como «Violeta ausente».En 1964, logró una marca histórica al convertirse en la primera latinoamericana en exponer individualmente en el museo del Louvre. También escribió el libro Poesía popular de Los Andes y la televisiónsuiza filmó el documental Violeta Parra, bordadora chilena, que se constituyó en una de las escasas fuentes audiovisuales que hoy se conservan de la artista.
En este periodo, forjó una firme relacióncon el antropólogo y musicólogo suizo Gilbert Favre, el gran amor de su vida —con el que vivió en Ginebra, compartiendo su tiempo entre Francia y Suiza—, y destinatario de sus más importantescomposiciones de amor y desamor: «Corazón maldito», «El gavilán, gavilán», «Qué he sacado con quererte», entre muchas otras.
En esta época, surgieron sus textos más combativos: canciones como «Miren cómo...
Regístrate para leer el documento completo.