Socorrismo

En el año 814 se encontraron en Galicia reliquias
atribuidas al apóstol Santiago, venerado en
Hispania desde la época romana. Las noticias del
hallazgo se van distribuyendo y en el siglo XI la
peregrinación comenzó a adquirir su dimensión
europea, gracias a los esfuerzos de los reyes
castellanos y navarros (Sancho el Mayor y
Alfonso VI) y a los monjes cluniacenses.
El texto que máscontribuye a la difusión es el
Liber Sancti Jacobi (más conocido como Codex Calixtinus) que incluye la vida,
milagros y leyenda jacobea, una guía del peregrino y la llamada Crónica pseudo
Turpin, que incluye la Chanson de Roland. En esta crónica prácticamente se
atribuye a Carlomagno el establecimiento de un Camino que ni siquiera menciona
como tal. Esta obra generará toda una literatura“antifrancesa” o “nacionalista”
para atribuir el mérito del Camino a los monarcas
hispanos (Poema de Fernán González, Vida de
San Millán o Poema de Alfonso XI).
En la Edad Media el Camino de Santiago se
convierte en la vía de difusión de las novedades
literarias en Europa, gracias a la peregrinación de
juglares. La lírica y la épica francesa, occitana,
gallega o castellana se influyen mutuamente. ElCamino se convierte en uno de
los eslabones que unen la literatura peninsular con la europea, frente a los que
conectan con la tradición oriental. Lo más curioso de esta literatura jacobea son
los temas abordados. En general, los peregrinos literarios están más preocupados
de los asuntos humanos que de los divinos, teniendo en cuenta que la
peregrinación tenía que ver con la devociónreligiosa. Está costumbre llega al
Libro de buen amor del Arcipreste de Hita. Las historias de amores, las leyendas
épicas y el uso del traje de romero como disfraz son
temas recurrentes. Los milagros son también tema
recurrente, aunque se basan en un número limitado de
modelos que se van modificando en diferentes lugares de
la ruta europea. Es el caso del milagro de Sto. Domingo,
del gallo y lagallina, que, siendo posiblemente la versión
más pintoresca, tiene ejemplos similares a lo largo del
Camino Europeo. Dentro de lo milagroso, son
importantes las implicaciones bélicas de los santos, que,
en su versión más famosa, se representan en el Santiago
Matamoros de las batallas de Clavijo o
Coimbra. Otros ejemplos de literatura
milagrosa vinculada con la ruta jacobea están
en las obrasde Gonzalo de Berceo (Vida de San
Millán, Milagros de Nuestra Señora,…) y en
las Cantigas de Alfonso X. Son de reseñar, en
el siglo XIV, las experiencias viajeras de
Hermann Künig Von Vach (1496) y la del
obispo de Armenia, Martiros de Aezendjan.
La crisis de las peregrinaciones, a partir del siglo XVI, provoca una disminución
de la literatura jacobea. En el Siglo de Oro solo Tirso deMolina, con La Romera de
Santiago trata el tema y La pícara Justina (1605) de Francisco López de Úbeda
cuenta la vida de una mesonera estafadora en el Camino. Hay autores que hablan
de que la figura del pícaro aludía, en principio, a los falsos peregrinos que vivían
de la caridad jacobea. De esta época es el Viaggio di Domenico Laffi. En el siglo
XVIII, destaca el relato de la peregrinación deDiego de Torres Villarroel, en su
autobiográfica Vida.
Ya en el primer tercio del siglo XX, encontramos alusiones al Camino en Valle
Inclán, Rubén Darío, Lorca o Gerardo Diego. También encontramos importantes
estudios sobre el Camino como La aventura del Camino de Santiago de Barret y
Gurgand; Las peregrinaciones a Santiago de
Compostela (1948) de Vázquez de Parga, Lacaría y
Uría Ríu; y ElCamino de Santiago (1958) de
Walter Starkie, gran hispanista irlandés.
Desde los años 80 surge una inmensa cantidad
de literatura de todo tipo sobre el Camino de
Santiago. Merecen destacarse como relatos
personales, además de las mencionadas a posteriori: En camino a los cuarenta de
García Hourcade y Serra Martínez y Nunca llegaré a
Santiago de Gregorio Martín, duramente criticada por...