socorro
12 cuentos para caerse de miedo
Elsa Bornemann
rei
argentina
Este libro se recomienda
a partir de los 11 años
TEXTO
Elsa I. Bornemann
ILUSTRACIÓN DE TAPA
Alejandro Ravassi
DISEÑO
Andrea Ronco
DIRECCIÓN DE COLECCIÓN
Carlos Silveyra
1ª edición: mayo 1988
15ª edición: noviembre 1991
Título original: ¡SOCORRO!
Elsa Bornemann
R.E.I. Argentina S.A.
Moreno3362, Buenos Aires,
República Argentina
ISBN: 950-695-014-8
2
ÍNDICE
PRÓLOGO DE FRANKENSTEIN ............................................ 4
PRIMERA PARTE ................................................................... 7
LA DEL ONCE "JOTA .............................................................. 8
MANOS................................................................................. 13
LOS MUYINS ......................................................................... 18
LA CASA VIVA ...................................................................... 22
SEGUNDA PARTE ................................................................ 35
CUENTO DE LOS ANGELITOS ............................................ 36
EL MANGA............................................................................ 41
NUNCA VISITES MALADONNY ............................................ 46
JOICHI, EL DESOREJADO ................................................... 51
TERCERA PARTE ................................................................ 61
CUANDO LOS PÁLIDOS VIENEN MARCHANDO ................ 62
AQUEL CUADRO.................................................................. 66
HOMBRE DE NIEVE ............................................................. 71
MODELO XVZ-91 .................................................................. 76
EPÍLOGO............................................................................... 87
3
PRÓLOGO
Celebro —con todos mis corazones (el literario y los cinematográficos)—
la publicación de este nuevo libro deElsa Bornemann.
Ella me había prometido escribirlo poco tiempo después que nos
conocimos, cuando era apenas una criatura más o menos así de alta y —como
a casi todos los niños— le encantaban los cuentos de terror (aunque se cayera
de miedo al leerlos o escucharlos...).
A pesar de su corta edad, al enterarse de la tremebunda historia de mi
vida E.B. me compadeció y comprendió que lo que yonecesitaba —
desesperadamente— era ser amado. Me trató —entonces— del mismo modo
que a su familia o a sus compañeros de escuela y yo respondí con profunda
lealtad a sus sentimientos: jamás le hice el menor daño.
Un día —en el que me sentía monstruosamente triste— E.B. me
prometió —para mimarme, un regalo hecho por ella, especialmente para mí.
"Cuando usted cumpla 170 años y yo sea grande —medijo— voy a escribir un
libro de cuentos que le van a poner los pelos de punta, querido Frankie", y
acarició una de mis repulsivas mejillas, a la par que me dedicaba la mejor de
sus sonrisas.
Quererla a Elsa es fácil. Quererme a mí, no. Por eso, valoré tanto su
amistad. Hasta que la conocí, no sabía lo qué significaba tener un alma amiga.
Toda la gente a la que intentaba acercarme huía de mí—despavorida— debido
a mi apariencia, ya que —según dicen— soy horrible y los seres humanos
suelen fijarse en esos detalles para querer o no a otro, en vez de tomar en
cuenta la fealdad o hermosura de los sentimientos.
Nadie podrá imaginarse mi sufrimiento: ¡es insoportable que a uno le
adjudiquen —siempre— el papel del malo de la película!
Seguramente —a esta altura de mi relato— muchos deustedes estarán
pensando que E.B. era una nena horripilante, pesadillesca, y que por eso me
aceptaba con tanta naturalidad.
Nada que ver. Todos la encontraban bonita, simpática y despertaba
cariño y se lo decían, así como a mí me gritaban cosas irreproducibles y
únicamente me ganaba el miedo y el odio de los demás.
Pero para qué recordar —ahora— momentos tristes, si también los he
tenido...
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