Socrates

El 12 de septiembre de 2005, Joseph Ratzinger pronunció un discurso en la Universidad de Ratisbona. Bajo el título "Fe, razón y universidad", que ha sido ampliamente discutida, pero mucho menos se entiende más. Ratzinger dice muy claramente que él está tratando de "una crítica de la razón moderna desde dentro", y señala que que este proyecto "no tiene nada que ver con poner el reloj a la épocaantes de la Ilustración (Ilustración), rechazando las convicciones de lo moderno edad. Los aspectos positivos de la modernidad deben ser conocidos sin reservas. "
Ratzinger está pidiendo a los occidentales que "comparten la responsabilidad por el recto uso de la razón" para volver al tipo de examen autocrítico de sus propias creencias que fue el sello distintivo del pensamiento griego antiguo ensu mejor momento. El espíritu que anima a la dirección de Benedicto XVI es el espíritu de Sócrates. Benedicto XVI invita a todos nosotros nos preguntamos, ¿Sabemos realmente lo que estamos hablando cuando hablamos de la fe, la razón, Dios y la comunidad?
Para muchos, les parecerá paradójico que el Romano Pontífice ha invocado el espíritu crítico de Sócrates. El Papa, después de todo, es laencarnación de la autoridad tradicional de la Iglesia y la Iglesia se supone que tiene todas las respuestas. Sin embargo, Sócrates fue famoso por ser el hombre que tenía todas las preguntas. Lejos de hacer cualquier reclamo a la infalibilidad, Sócrates sostuvo que la vida no examinada no vale la pena vivir, y que estaba dispuesto a morir antes que dejar el proceso de autocrítica. Sócrates se negóincluso llamarse a sí mismo sabio, argumentando que sólo merece ser llamado un "amante de la sabiduría."
Sócrates hábilmente empleados paradoja como una manera de conseguir que la gente piense, pero ni siquiera él podría haber sido confundidos por la paradoja de un Papa católico romano que está pidiendo un retorno a la duda socrática y autocrítica. Benedicto debe ser perfectamente consciente de estaparadoja se, por lo que debemos suponer que él también está utilizando la paradoja de forma deliberada, como hizo Sócrates, y por la misma razón: para asustar a sus oyentes a repensar lo que creían que ya sabían.
Pero ¿por qué el Papa Benedicto XVI siente la necesidad en este momento en la historia para enfatizar y resaltar el papel que la investigación filosófica griega que se reproduce en "labase de lo que con razón se puede llamar Europa"? La Europa cristiana, después de todo, era una fusión de diversos elementos: la tradición hebrea, la experiencia de la primitiva comunidad cristiana, el genio romano de ley, el orden y la jerarquía, el amor a los bárbaros germanos de la libertad, entre muchos otros. En esta amalgama cultural, la filosofía griega ha desempeñado ciertamente un papel,sin embargo, su contribución fue polémica desde el principio. En el siglo II dC, el eminente teólogo cristiano Tertuliano, que había sido entrenado como abogado romano, preguntó con desprecio: "¿Qué tienen que ver Atenas con Jerusalén?" Para Tertuliano, Atenas representada por aire caliente y la especulación salvaje.
San Clemente de Alejandría argumentó que la filosofía griega había sido dada porDios a la humanidad como una segunda fuente de la verdad, comparable a la revelación hebreo. Para San Clemente, Sócrates y Platón no eran pensadores paganos, sino que prefigura el cristianismo. Contrariamente a lo que creía Tertuliano, el cristianismo necesita algo más que Jerusalén: Se necesita Atenas también. El Papa Benedicto XVI en su discurso de hace una afirmación sorprendentemente similar:"El encuentro entre el mensaje bíblico y el pensamiento griego no era una casualidad." Este encuentro, por Benedicto XVI, fue providencial. Por otra parte, Benedicto XVI afirma que el acercamiento "interior entre la fe bíblica y la reflexión filosófica griega fue un acontecimiento de importancia decisiva no sólo desde el punto de vista de la historia de las religiones, sino también de la de la...