Soja...Solo Soja

Florencio Varela, 03 de marzo de 2013
Soja… solo soja

NO DEJEMOS QUE LA SOJA NOS TAPE EL BOSQUE

Que problema titular a la protagonista que más títulos originales se ha llevado en los últimos tiempos, alguno de ellos más que ingeniosos y descriptivos, hablan por sí mismos:
“Del granero del mundo a una republiqueta sojera”, “Con la soja al cuello”, “Hambre de soja”, “Una maquinaria dehambre, deforestación y devastación socio-ecológica”, “El lado oscuro de la soja”, “Argentina: del granero del mundo al hambre generalizado, de la mano del monocultivo de soja transgénica”, “Soja y sometimiento: A propósito de la soja solidaria”, “Soja + Pinos = País en Quiebra”, “Repúblicas Unidas de la Soja”, “Soja para hoy, hambre para mañana”… y la lista sigue.

Viajando por mis reminiscenciasinfantiles, recuerdo de pequeño a mí maestra decir con el entrecejo fruncido: - A ver chicos, saquen una hoja. Actividad: Redacción, tema: “La Vaca”.
Hoy seguramente mi maestra hubiese finalizado con: …tema: “La Soja”.
Sería redundante e incluso aburrido, repetir lo que innumerable cantidad de especialistas han dicho acerca del tema. Esto es una simple reflexión en voz alta.

Muchaneurastenia y oposición generalizada, reclamos por doquier, desde la solicitud de aplicación del principio precautorio a la soja transgénica, en todas sus versiones y toda su parafernalia de agrotóxicos, impacto socio-ambiental y concentración latifundista, hasta el pedido casi desesperado para que se detenga la expansiva “metástasis ambiental” por el arrollador avance de los cultivos de sojatransgénica, traspasando la lógica y la ética de una frontera agraria, que va corriendo por las venas, que continúan abiertas, en nuestra América Latina.
Hemos caído en un círculo vicioso, muy parecido al de quien ingresa en el ciclo de la adicción.
El “organismo social” no puede desprenderse del mal que lo aqueja, que lo alimenta y aliena.
El “telencéfalo político” indica que el mal nos sirve paraocultar otros males, de necesidad, degradación y hambre inmediata del “gran organismo social”. Incluso permite financiar materialmente malas decisiones anteriores del propio “telencéfalo político”, que no solo reitera pecados de antaño, sino que los magnifica, permite facilitar la expansión sojera como una infección migratoria a lugares disímiles, inimaginables y altamente endebles del “organismoambiental” (entiéndase: Región Norte- Noroeste argentino, Norte patagónico), donde el mal se acelera e incrementa, donde vorazmente ataca bosques nativos, reservas naturales y comunidades autóctonas.
Acomete espacios de otros cultivos no tan redituables pero si más estables, que estaban relacionados de manera casi simbiótica con un medio largamente antropizado.
El mal avanza de manerairreversible, arrasadora. El signo dólar sirve de manto que permite ver solo lo que se desea ver. Para el sistema bestial, está la mesa servida, todo listo para un banquete sin precedentes.
La “santa” biotecnología, que se ufanaba de ser la salvadora de los males que aquejan a la humanidad des el hambre hasta la salud humana, ha comido la manzana del pecado y deberá pagar por ello, por haberse convertido enla mano fustigadora de una masacre socio-ambiental masiva y padecerá la condena social.
La “santa” biotecnología, la de la ética y la moral perdida, parece decirnos:- he encontrado mi santo… En realidad, ha encontrado algo peor… a una empresa multinacional (Monsanto), algo así como la mano inoculadora, a través de la biotecnología, de esta enfermedad.
Empresa que, a nivel mundial, allá por2004, contaba, “en el mundo”, con 15 mil empleados y sus ganancias anuales estaban, alrededor de los 6 mil millones de dólares. Que desproporción, ¿no? Esto marca el espíritu empresarial dentro de un sistema económico global y perverso.

Claro que los Monsanto, distribuidores globales de la sacarina, productores a gran escala del 2,4-D [1] (Ácido 2,4-diclorofenoxiacético) y el 2,4,5-T [2] (Ácido...