Solo Los Inocentes Rachel Abbott

Páginas: 526 (131253 palabras) Publicado: 10 de octubre de 2015
Índice
Cubierta
Prólogo
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35

36
37
38
39
40
Agradecimientos
Créditos

Para Dodo, por brindarme el amor de las palabras

Prólogo

A través de las altas ventanas se filtraba un sol resplandeciente que inundaba todas las
superficies con su luz deslumbrante. Todos los rincones de la habitación estabanbañados por un suave brillo ambarino que realzaba sus elegantes proporciones en
todo su esplendor. Un desastre. Lo único que no había calculado era un día soleado.
El impacto máximo: eso era lo que pretendía. La ropa, el pelo, las joyas; su cuidado
por los detalles había sido impecable, y cualquier nota falsa influiría en la percepción
que tendría él de su credibilidad. Pero en lugar de completar lailusión con una
iluminación sutil y sombras que crearan ambiente, la habitación se parecía más a un
escenario iluminado. Estaban en Londres, a finales de octubre. Se suponía que debía
llover.
No sabía qué hacer. ¿Cerrar las cortinas, quizá? No. Nunca funcionaba. Era
demasiado evidente, y a él no le gustaría. Pero se le acababa el tiempo, y debía pensar
con rapidez. Lo ajustó todo en un momentohasta que le pareció que no podía estar
mejor. Giró un sillón de orejas de piel para colocarlo casi de cara a la puerta, lo
suficiente para poder verle el rostro sin volver la cabeza. Pero no de frente; eso la
dejaría sin lugar donde esconderse. Y, por supuesto, la luz de la ventana tenía que
quedar detrás de ella para que su cara quedara en sombra y disimulara cualquier cosa
que sus ojos revelaransin querer.
Ya había acabado con los preparativos. Solo le quedaba esperar y pensar en la
inevitabilidad de lo que estaba a punto de suceder. Todos los músculos de su cuerpo
estaban en tensión y tenía los hombros rígidos. Se obligó a relajarse. Oyó el ruido de
un coche que se detenía y una puerta que se cerraba antes de que el automóvil
arrancara de nuevo. Se miró rápidamente al espejo paraasegurarse de que todo estaba
perfecto, y se alarmó cuando advirtió que sus ojos delataban su torbellino interior.
Respiró hondo y reprimió los pensamientos e imágenes que se agolpaban en su
cabeza, esforzándose por recuperar la compostura.
Durante unos minutos no escuchó nada más, pero sabía que él estaba en la casa. No
se oían pasos; la gruesa moqueta de pelo corto que cubría el suelo del vestíbulo yla
escalera hasta el tercer piso sofocaba todo ruido. Sin embargo, él se acercaba al
dormitorio. Cada una de las terminaciones nerviosas de su cuerpo se lo decía.
La puerta se abrió lentamente, pero él permaneció en el umbral con una expresión
inescrutable. Durante unos instantes no pronunció palabra, y ella le sostuvo la mirada
con firmeza. No se podía negar que era guapo. El traje negro a medidale sentaba de
maravilla a su cuerpo esbelto, y sus cabellos salpicados de gris estaban tan
inmaculados como siempre. Parecía exactamente el hombre de éxito que era. Saltaba a

la vista por qué lo adoraban los medios.
Por fin el hombre sonrió, insinuando apenas con la curva de los labios un indicio
de la victoria que sin duda sentía. El corazón de ella dio un vuelco, pero sus ojos no
vacilaron.–Sabía que vendrías. –Calló y la observó de arriba abajo. No tenías elección, claro.
–Asintió como si estuviera satisfecho consigo mismo–. Estás perfecta.
Ella sabía que no podía permitirse ningún error y había elegido la ropa con esmero:
una falda negra de piel hasta la rodilla, con medias negras brillantes, y un top blanco
de punto con cuello de pico, diseñado para ajustarse a sus pechos y ofrecerapenas un
atisbo de lo que había debajo. Tenía las piernas cruzadas con elegancia, mostrando
una pizca de muslo, y sus joyas de oro sencillas pero elegantes completaban la
imagen. Parecía complacido. Había pasado la primera prueba, y rezó para ser capaz de
mantener a raya las emociones solo un poco más.
–¿A qué vienen los guantes? –preguntó él, fijándose por primera vez en los guantes
negros de...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • rachel
  • Los Inocentes
  • Inocencias
  • Los Inocentes
  • Inocencia
  • Los inocentes
  • Los Inocentes
  • inocencia

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS