Sor Juana
Sor Juana justifica sus estudios demostrando su determinación y pasión por elconocimiento y su derecho a aprender. “Acuérdome que en estos tiempos, siendo mi golosina la que es ordinaria en aquella edad, me abstenía de comer queso, porque oí decir que hacia rudos, y podía mas conmigo el deseo de saber que el de comer” (48). Desde pequeña compara sus deseos de aprender con el apetito de los niños, y su abstinencia al queso demuestra su miedo a ser ignorante. Nos informasobre las tradiciones sexistas que había, cuando las mujeres no podían ir a la universidad, “empecé a matar a mi madre con instantes e importunos ruegos sobre que, mudándome el traje, me enviase a Méjico, en casa de unos deudos que tenía, para estudiar y cursar la Universidad”(48). Este ejemplo lo usa para demostrarle al obispo su rebeldía, y que desde pequeña no quería seguir las estrictas normas quelas mujeres debían atener; quería tener el mismo derecho que los hombres. Nada iba a pararla de los estudios, ni el tener que pretender ser hombre. También se encarga de demostrar su extrema dedicación y creencias radicales, mencionando que cuando se puso a estudiar Latín (en ese entonces era el lenguaje que simbolizaba empoderamiento y sabiduría); cada vez que no progresaba lo suficiente, secortaba una pulgada de su pelo hasta que dominaba lo que estaba aprendiendo porque “no [le] parecía razón que estuviese vestida de cabellos cabeza que estaba tan desnuda de noticias, que era más apetecible adorno" (50). En su defensa, muy listamente habla de el vasto conocimiento que a obtenido, desde leyendo sobre física, historia, las ciencias etc. y insiste que son conocimientos necesarios parapoder tener una mejor perspectiva de la religión y las escrituras que aprende en el convento. En cierto punto de la carta le dice a Sor Filotea, “pero, señora, ¿qué podemos saber las mujeres sino filosofías de cocina? Bien dijo Lupercio Leonardo, que bien se puede filosofar y aderezar la cena. Y yo suelo decir viendo estas cosillas: Si Aristóteles hubiera guisado, mucho más hubiera escrito” (74).Esta no es la primera vez que se dirige al obispo como señora, de hecho lo hace para seguir el juego de roles de genero sexual y para que “Sor Filotea” se sienta y se ponga en los humildes e inoportunos pies de una mujer. Luego “lleva” a Aristóteles – una figura obviamente muy importante y respetada – a la cocina (un lugar visto solo para las mujeres, donde ellas lavan y recogen detrás de loshombres); sutilmente indicando que ellas también pueden filosofar sobre cosas cotidianas. No hace falta ser hombre para ser filosofo. Finalmente, Sor Juana aprovecha a mencionar a varias mujeres respetadas por la sociedad y se pone a lado de ellas; ella sabe el impacto que ha tenido en Mexico y aunque suela sonar un poco arrogante, se lo recuerda al obispo.
Sor Juana astutamente logra utilizar cosas...
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