Soy Especial

¡SOY ESPECIAL!
Era su segundo día de clase. Hugo se sentó en el primer pupitre del aula, al lado de la ventana, como le recomendó su mamá. La profesora entró en clase y les dijo "buenos días". Hoyvamos a estudiar algunos animales. Comenzaremos con el asno, ese animal tan útil a la humanidad, fuerte, de largas orejas, y...
- ¡Como Hugo!, la interrumpió una voz que salía de atrás del salón.Muchos niños comenzaron a reír ruidosamente y miraban a Hugo. - ¿Quién dijo eso?, preguntó la profesora, aunque
sabía bien quién lo había dicho.
- Fue Quique, dijo una niña señalando a su lado a unpequeñín pecoso de cinco años.
- Niños, niños, dijo Mily con voz enérgica y poniendo cara de enojo. No deben burlarse de los demás. Eso no está bien y no lo voy a permitir en mi salón.
Todosguardaron silencio, pero se oía algunas risitas.
Un rato después una pelota de papel goleó la cabeza de Hugo. Al voltear no vio quien se la había lanzado y nuevamente algunos se reían de él. Decidió no hacercaso a las burlas y continuó mirando las láminas de animales que mostraba Mily. Estaba muy triste pero no lloró. En el recreo Hugo y abrió su lonchera y comenzó a comerse el delicioso bocadillo quesu mamá le había preparado. Dos niños que estaban cerca le gritaron:
- Orejón, oye orejón, no comas tanto que va a salirte cola como un asno, y echaron a reír.
Otros niños a su alrededor lo miraron ytocando sus propias orejas, sonreían y murmuraban. Hugo entendió por primera vez, que de verdad había nacido con sus orejas un poco más grandes. "Como su abuelo Manuel", le había oído decir a su papáuna vez.
De pronto se escucharon gritos desde el salón de música, del cual salía mucho humo. Hugo se acercó y vio a varios niños encerrados sin poder salir, pues algún niño travieso había colocadoun palo de escoba en los cerrojos.
A través de los vidrios se veían los rostros de los pequeños llorando, gritando y muy asustados. Dentro algo se estaba quemando y las llamas crecían.
Los...