sra Bravo

El conflicto entre el trabajo y la familia
Revista Gestión Práctica de Riesgos Laborales, Nº 78, Sección Artículos, 01 de Enero de 2011
Bernardo Moreno-Jiménez, Ana Isabel Sanz-Vergel,

Los cambios económicos y sociales que han tenido lugar en las últimas décadas, han hecho que cada día resulte más complicado compaginar la vida laboral con la familiar. Desde este punto de vista, contarcon estrategias para recuperarse de las demandas laborales y familiares resulta fundamental para evitar los efectos negativos sobre la salud y el bienestar. El análisis de estos temas actuales es importante para plantear posibles intervenciones a nivel individual y organizacional. Ofrecer facilidades para que los trabajadores puedan conciliar su vida laboral y familiar, así como fomentar larecuperación del estrés son estrategias que ayudarán a crear organizaciones saludables.
Durante las últimas décadas, ha existido un interés creciente tanto a nivel académico como a nivel social, por analizar las relaciones existentes entre la vida laboral y familiar. Dicho interés es una consecuencia de la creciente complejidad y demanda tanto de la vida familiar y laboral como de los cambios económicosy sociales, que han tenido lugar en los últimos años y, que han afectado al modo en que se organizan y estructuran no sólo las empresas sino también las familias. Entre los cambios económicos más relevantes, merece la pena señalar la globalización de la economía como un factor causante de problemas para conciliar la vida laboral y familiar. Las organizaciones han entrado en una espiral decompetitividad en la que es necesario ofrecer servicios de forma rápida y continuada, por lo que los horarios de trabajo son interminables y obligan a los empleados a jornadas laborales que abarcan lo que se ha llamado “horas poco sociales” (Geurts, Rutte y Peeters, 1999).
Con respecto a los cambios sociales, sin duda uno de los más relevantes ha sido la incorporación de la mujer al trabajo. En España,mientras que la tasa de empleo de las mujeres en 1999 era de 31.64%, este porcentaje ha aumentado en 2009 hasta un 53.27%. Esta incorporación supone un cambio en la estructura y en la dinámica familiar, y conlleva dificultades para compaginar trabajo y familia. Aquellas mujeres que habitualmente se encargaban de atender las responsabilidades familiares ahora también deben atender las laborales,por lo que se encuentran con mayores problemas de conciliación. La nueva situación afecta también a los hombres pues se genera inevitablemente un replanteamiento del juego familiar de roles ya que como Paterna y Martínez (2006) sugieren, se les pide mayor colaboración en tareas familiares. Las nuevas exigencias, aunque sigan distribuyéndose de forma desigual, afectan en principio a hombres ymujeres.
Las relaciones entre ambos dominios se vuelven más complejas en función de los nuevos cambios, por lo que profundizar en los mecanismos de interacción resulta de vital importancia para evitar, o al menos controlar, los efectos negativos. Por otra parte, cada vez se reconoce en mayor medida la importancia del nivel de conciencia por parte de los trabajadores de su propio nivel de estrés, puesel primer mecanismo en su proceso de control y abre la capacidad para recuperarse de las situaciones estresantes vividas en el trabajo evitando así problemas de salud. Desde estos planteamientos, se ha comenzado a relacionar el concepto de recuperación con el conflicto trabajo-familia, basándose en el argumento de que es mucho más probable que exista un desequilibrio en ambos dominios si unapersona se enfrenta a eventos estresantes en el trabajo sin capacidad para recuperarse de los mismos (Taris et al., 2006).
¿Por qué surge el conflicto entre el trabajo y la familia?
Dentro del campo del conflicto trabajo-familia, existe una teoría clásica que nos ayuda a responder a esta pregunta: ¿Por qué se puede producir un desequilibrio entre dos ámbitos tan fundamentales de nuestras vidas?...