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Procura crear un espacio para conversar con tu hijo y explicarle que no es una conductacorrecta ni saludable. No es correcta porque no está bien visto y no es saludable porque nuestras manos están expuestas a microbios constantemente y al llevarlas a la boca, dealguna manera nos estamos ‘comiendo’ estos. Explícale claramente las consecuencias (dolor de estómago, fiebre …) sin el afán de asustarlo.
Luego de reflexionar juntos, sesugiere desviar su atención, es decir mantenerlos ocupados. Si vemos que los chicos se está mordiendo las uñas pídele que ponga la mesa, que pinte… Finalmente, no le repitasel tema constantemente. Si lo encuentras con las manos en la boca, bájale la mano sin decirle nada. No es recomendable repetir el mensaje inicial (“ya te he dicho que tepuedes enfermar…”) porque al hacerlo estamos reforzando esa conducta. Mientras el niño más se muerde las uñas, el papá más lo mira. El niño inconscientemente podríarazonar asi: ‘no importa que mi papá o mama me rete, lo que importa es que me está atendiendo’ y eso no es lo que queremos lograr.
Por: Jesica Kuwae Psicóloga clínica infantil ydanza-terapeuta - Casa Galli
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