suicidio
Sobre todo antes, a fin de determinar mejor cual es el grado de inmoralidad del suicidio investiguemos que relaciones sostienecon los otros actos inmorales, singularmente con los crímenes y los delitos.
Según M. Lacassagne hay una relación regularmente inversa entre el movimiento de los suicidios y de los crímenes contra lapropiedad (robos, calificados, incendios, bancarrotas, fraudulentas etc) cierto número de malas malas acciones han desaparecido, pues, de la columna de los crímenes, pero es para reaparecer en ladelos delitos; y son crímenes contra la propiedad los que más se han beneficiado de esta jurisprudencia hoy consagrada.
Entonces si las estadísticas los señala en menor número es de temer de estadisminución sea exclusivamente debida a un artículo de contabilidad. Pero aunque esta baja fuese real no se podría deducir nada de ella ; porque si, a partir de 1854 las dos curvas van en sentido inversodesde 1826 a 1854 la de los crímenes contra la propiedad o sube al mismo tiempo que la de los suicidios, aunque menos a prisa, o permanece estacionaria. Sin embargo estas observaciones habrán quedadoaisladas cuando la escuela italiana de criminología se apodero de ellos.
Ferri y morselli especialmente, las hicieron base de toda una doctrina. Según ellos el antagonismo del suicidio y del homicidioes una ley absolutamente y general.
El suicidio seria pues, un homicidio transformado. Con este título aparece casi como bienhechor, porque si no es un bien, es por lo menos un mal menor y que nosahorra otro peor. Por otra parte, aun cuando se reúnan bajo un mismo concepto todos los homicidios, parricidios, infanticidios, envenenamientos, la parte de la mujer en el conjunto es aún muyelevada.
Dado que el homicidio y el suicidio no derivan de un mismo estado psicológico, no es preciso investigar si hay un antagonismo real entre las condiciones sociales de que dependen.
El tipo de...
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