Sutagaos, principio y fin de un pueblo
Páginas: 13 (3226 palabras)
Publicado: 16 de junio de 2010
SUTAGAOS
Principio y fin de un
Pueblo
Fusagasugá
HISTORIA Para contar
Por Guillermo González Restrepo
Leyenda tallada en una placa de mármol donada por la Fundación Emilio Sierra para la Cultura de Fusagasugá y entronizada en la Plaza Cívica el 7 de mayo da 1984, por la Academia de Historia de Cundinamarca
PRESENTACIÓN
Amigo lector
Ponemos en sus manos el primerfascículo de la serie Cuadernillos de Historia Fusagasugueña, un compendio de los sucesos traídos desde la génesis del pueblo primitivo que habitó el valle en donde se recrea nuestra ciudad pasando por acontecimientos que fueron marcando distintas y determinantes épocas del terruño, para terminar con el señalamiento de algunos de los ciudadanos que con su trabajo forjaron la fusagasugueñidad
Estaclase de publicaciones que promueven el sentido de pertenencia y nuestra identidad histórico-cultural más que estar plasmadas como un formulamiento en mi bitácora gubernativa, están arraigadas en lo más profundo de mis sentimientos como Imperativo conductual heredado de mis mayores.
Imperdonablemente la historia de nuestra comarca si bien se encuentra escrita, muy poco es lo que de ella se hapublicado. Esa circunstancia ha motivado la creación de estos cuadernillos que aspiramos entregar a todos los estudiantes, profesores y ciudadanos fusagasugueños, abrigando la esperanza de que su contenido nos ilustre sobre el pretérito histórico de nuestra villa.
Para ella cantamos can el magnífica registro, índices y colección del Centro de Documentación de la Fundación Emilia Sierra para laCultura, y la siempre dispuesta colaboración del historiador Don Guillermo González Restrepo, Miembro de Número de la Academia de Historia de Cundinamarca, actual Consejero para las Comunicaciones de la Alcaldía de Fusagasugá quien, en este primer cuadernillo nos enseña, en singular descripción lírica, el origen del pueblo Sutagao, así como una sucinta pero agradable relación sobre los orígenes yposterior desarrollo de lo que hoy es la pujante ciudad de Fusagasugá.
WILLIAM GARCÍA FAYAD.
PRINCIPIO Y FIN DE UN PUEBLO
Se corrieron las aguas del gran lago y el Valle de los Sutagaos emergió como por encanto. El holoceno develó su epidermis glauca, delicada, y fueron entonces el Chocho, el Guja y el Sumapaz en donde las náyades nativas hallaron sempiterno refugio. Surgió, entonces, elFusacatán altivo, Usatama y Chinauta y aparecieron en lontananza los senos telúricos de la Quininí, sicaliptica deidad mitológica... seductora.
Sí! Quinini es la doncella que el Fusacatán pretende con ansia loca. Coqueta se esconde detrás del monte y en las tardes cuando el sol declina, vierte en destellos centellantes, bermejos, toda la pasión de su lujuria ardiente.
Fusagasugá fue agua yfuego también; Sutagaos hijos del sol, de nínfas acuáticas y ondinas silvestres; libres como el viento, plácidos cual vergel...
¿Quién si no la Mitología Muisca, guarda la verdad íntima del origen de la tercera más avanzada civilización continental amerindia? El Sutagao era sangre, era raza, era temple y carácter ancestral! Estaba hecho de arcilla primitiva cocida por los rayos eternos de supadre-dios y moldeado por las manos amorosas de Bachué, progenitora del imperio milenario. Dentro del reino al que perteneció poseía talante singular pero por sobre todo idolatraba la libertad porque nació sin compromisos ni ataduras; soberano. Achocolatada su piel, cabello lacio caldo con desgaire sobre sus hombros anchos y bien marcados; rasgados los ojos, pequeños, profundos y negros, vivarachos eimpacientes; nariz chata, pómulos sobresalientes, cuerpo ágil, complexo de no mayor estatura, torso desnudo, guayuco y taparrabo.
Aprendió de Bochíca a respetar la naturaleza, labrador, cazador; trabajó con espíritu emprendedor el oficio encomendado por el profeta: los colmenares no sólo fueron su obsesión sino guía política, social, laboral y económica.
El Zipazgo tuvo celos de la tribu...
Principio y fin de un
Pueblo
Fusagasugá
HISTORIA Para contar
Por Guillermo González Restrepo
Leyenda tallada en una placa de mármol donada por la Fundación Emilio Sierra para la Cultura de Fusagasugá y entronizada en la Plaza Cívica el 7 de mayo da 1984, por la Academia de Historia de Cundinamarca
PRESENTACIÓN
Amigo lector
Ponemos en sus manos el primerfascículo de la serie Cuadernillos de Historia Fusagasugueña, un compendio de los sucesos traídos desde la génesis del pueblo primitivo que habitó el valle en donde se recrea nuestra ciudad pasando por acontecimientos que fueron marcando distintas y determinantes épocas del terruño, para terminar con el señalamiento de algunos de los ciudadanos que con su trabajo forjaron la fusagasugueñidad
Estaclase de publicaciones que promueven el sentido de pertenencia y nuestra identidad histórico-cultural más que estar plasmadas como un formulamiento en mi bitácora gubernativa, están arraigadas en lo más profundo de mis sentimientos como Imperativo conductual heredado de mis mayores.
Imperdonablemente la historia de nuestra comarca si bien se encuentra escrita, muy poco es lo que de ella se hapublicado. Esa circunstancia ha motivado la creación de estos cuadernillos que aspiramos entregar a todos los estudiantes, profesores y ciudadanos fusagasugueños, abrigando la esperanza de que su contenido nos ilustre sobre el pretérito histórico de nuestra villa.
Para ella cantamos can el magnífica registro, índices y colección del Centro de Documentación de la Fundación Emilia Sierra para laCultura, y la siempre dispuesta colaboración del historiador Don Guillermo González Restrepo, Miembro de Número de la Academia de Historia de Cundinamarca, actual Consejero para las Comunicaciones de la Alcaldía de Fusagasugá quien, en este primer cuadernillo nos enseña, en singular descripción lírica, el origen del pueblo Sutagao, así como una sucinta pero agradable relación sobre los orígenes yposterior desarrollo de lo que hoy es la pujante ciudad de Fusagasugá.
WILLIAM GARCÍA FAYAD.
PRINCIPIO Y FIN DE UN PUEBLO
Se corrieron las aguas del gran lago y el Valle de los Sutagaos emergió como por encanto. El holoceno develó su epidermis glauca, delicada, y fueron entonces el Chocho, el Guja y el Sumapaz en donde las náyades nativas hallaron sempiterno refugio. Surgió, entonces, elFusacatán altivo, Usatama y Chinauta y aparecieron en lontananza los senos telúricos de la Quininí, sicaliptica deidad mitológica... seductora.
Sí! Quinini es la doncella que el Fusacatán pretende con ansia loca. Coqueta se esconde detrás del monte y en las tardes cuando el sol declina, vierte en destellos centellantes, bermejos, toda la pasión de su lujuria ardiente.
Fusagasugá fue agua yfuego también; Sutagaos hijos del sol, de nínfas acuáticas y ondinas silvestres; libres como el viento, plácidos cual vergel...
¿Quién si no la Mitología Muisca, guarda la verdad íntima del origen de la tercera más avanzada civilización continental amerindia? El Sutagao era sangre, era raza, era temple y carácter ancestral! Estaba hecho de arcilla primitiva cocida por los rayos eternos de supadre-dios y moldeado por las manos amorosas de Bachué, progenitora del imperio milenario. Dentro del reino al que perteneció poseía talante singular pero por sobre todo idolatraba la libertad porque nació sin compromisos ni ataduras; soberano. Achocolatada su piel, cabello lacio caldo con desgaire sobre sus hombros anchos y bien marcados; rasgados los ojos, pequeños, profundos y negros, vivarachos eimpacientes; nariz chata, pómulos sobresalientes, cuerpo ágil, complexo de no mayor estatura, torso desnudo, guayuco y taparrabo.
Aprendió de Bochíca a respetar la naturaleza, labrador, cazador; trabajó con espíritu emprendedor el oficio encomendado por el profeta: los colmenares no sólo fueron su obsesión sino guía política, social, laboral y económica.
El Zipazgo tuvo celos de la tribu...
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