Tabaquismo Juvenil
TABAQUISMO JUVENIL:
FUMAR ES UN VICIO QUE SE APAGA EN FAMILIA
Un tercio de los niños entre 13 y 15 años fuma en Chile, y los padres pueden evitarlo. AMALIA TORRES Cuando Myriam Reyes (15) y sus amigos se reúnen hay algo que nunca falta: los cigarros. Hasta el año pasado ella era la única del grupo que no fumaba, pero hoy no sólo lo hace cuando está con ellos,también sostiene uno en la mano cuando está sola en su pieza o al terminar de almorzar. No pasa un día sin que encienda al menos tres cigarrillos. Y si es fin de semana, la cuota sube rápidamente. Para ella llevar una cajetilla en la mochila no es extraño. En su curso sólo tres compañeros no compran cigarros, aunque Myriam cree que con el tiempo también van a fumar. "Ya van a caer", pronostica.Quizás los augurios de Myriam no estén errados. Según la última encuesta mundial de tabaquismo juvenil, el 33% de los chilenos que están entre séptimo y primero medio fuma habitualmente, y el 18% de los niños empieza con el vicio antes de los 10 años. Los expertos en adicciones explican que el hecho de que un joven consuma nicotina tiene consecuencias más negativas que si empezara de adulto. "Mientrasmás chico se comience a fumar, mayores posibilidades de volverse adicto. No sólo porque tienes más años por delante para consumir -lo que afecta más la salud-, sino también porque a menor edad el cuerpo es más vulnerable a la adicción", sentencia Teresa Izquierdo, sicóloga del Conace. El rol de los padres La clave no está sólo en prohibir que sigan fumando. La verdadera solución está en prevenirque los jóvenes comiencen con el mal hábito, porque, como explica el siquiatra Carlos Téllez de la Unidad de Tabaquismo de la Clínica Alemana, este vicio es más fuerte y rápido que el alcohol y la marihuana, y puede ser el primer escalón para otras drogas. Desde que Myriam era una niña ha visto a su padre con un cigarro en la mano. Sus hermanas mayores rápidamente siguieron el ejemplo. y por esocuando ella empezó con el tabaco nadie se sorprendió. Su papá incluso suele prestarle dinero para comprar cajetillas en la esquina.
Su caso es bastante común. Según Patricia Bruce, terapeuta del Centro Integrativo de Adicciones de la Universidad de Santiago, es alto el porcentaje de hijos de fumadores que replican su historia. "Ellos ya traen en su carga genética una tendencia adictiva, pero aesto se suma que los niños de 0 a 10 años no cuestionan lo que aprenden. Si a esa edad ven a su papá fumando, no se dan cuenta de lo negativo del cigarrillo. Para ellos lo más importante es lo que hacen los progenitores", advierte Bruce. Por eso si los padres ya tienen problemas con el tabaco, es importante la forma como abordan con el niño su vicio. Explicarles los efectos negativos que ellosmismo sienten al fumar y confesarles que no logran dejar el cigarrillo aunque les gustaría sirve bastante. "Para ejemplificar lo mal que les hace hay que mostrarles consecuencias inmediatas más que a largo plazo. Si les dicen que les va a dar cáncer les parece muy lejano, pero si se les explica que al fumar les costará correr y se cansarán más, son argumentos útiles para los jóvenes", sentencia TeresaIzquierdo. Conocer al hijo Pero no siempre los niños fuman por imitar a sus padres. También hay motivos propios de la edad, cuando los jóvenes buscan por todos los medios ser parte de un grupo. Por eso es fundamental, según los especialistas, que los padres tengan una conversación con los hijos para saber qué los lleva a interesarse en el tabaco. La imagen que proyecta la televisión delcigarrillo es uno de esos factores, según la terapeuta Patricia Bruce. "A los jóvenes les están diciendo constantemente que fumar hace bien, que si fumo soy regio. Por eso hay que enseñarles a cuestionarse, a analizar si realmente es tan bueno como sale en los comerciales". Pero la razón más fuerte de los jóvenes para fumar es el factor social. "Muchas veces el cigarrillo ayuda a comunicarse. Al...
Regístrate para leer el documento completo.