tareas
CAPITULO VII
LA DEFINITIVA FUNDACION
Presentado por:
MICHEL MONTEZUMA
Presentado a:
ELVER PIÑEROS
CORPORACIÓN UNIVERSITARIA DEL META
MEUM COLOMBIA
VILLAVICENCIO
2013
CAPITULO VII
LA DEFINITIVA FUNDACION DE SANTAFE EN ABRIL DE 1539
Por los datos contenidos en todas las crónicas coloniales. Las noticias concuerdan enafirmar que tuvo lugar después de completarse la conquista de Bogotá, Tunja, Sogamoso y Duitama, y antes de que Jiménez, Belalcázar y Federmán, emprendieran su viaje de regreso a España.
El cura Juan de Castellanos, seguido, como siempre, de su émulo Fray Pedro Simón y después de él, por copiarlo, de todos los cronistas del siglo XVII, consideran a Belalcázar el alma de tal fundación[. Jiménez,decidido a trasladarse a España para pedir el gobierno de las tierras por él descubiertas, reunía dinero aún a costa de sus compañeros de armas y, al saber, por noticias que trajo Belalcázar, de la muerte de Fernández de Lúgo y que la gobernación de Santa Marta estaba acéfala, su único deseo era trasladarse a la mayor brevedad a la Corte Española, provisto de la mayor cantidad de dinero,despreocupándose de la organización en regla del territorio descubierto. Federmán, una vez recibida su recompensa, no toma parte activa, según el cronista, en ningún asunto de la nueva fundación. Sólo una larga perorata de Belalcázar, hecha ante las gentes de los tres ejércitos reunidos, en un elegante estilo de la época, prolífica en nobles ideas sobre la conquista, colonización, tratamiento deindios, etc., inclinó a Jiménez a gastar su precioso tiempo en las diligencias de la fundación. (Véase Cap. XII y XIII).
De estas noticias difiere completamente el más antiguo cronista del Nuevo Reino, Fray Pedro Aguado. Según él, la única y definitiva fundación de la ciudad la hizo Jiménez, antes de la arribada de los dos caudillos, Federmán y Belalcázar, a Santafé. Después del reparto del botín deguerra, dice, y deseoso Jiménez de trasladarse a España , informó a los indios de la decisión de quedarse en la tierra, —a lo que ellos, dice el cronista, consintieron—, mandó a algunos capitanes al territorio de los Panches y a otros hacia el Oriente, para que eligiesen un sitio apropiado, y, una vez escogido el lugar (en tierra de Teusacá, sujeto al cacique Tuna), mandó al capitán Gómez delCorral buscar indios de Guatavita para construir las casas que necesitaba el ejército . Después repartió solares entre los soldados, futuros vecinos de Santafé, nombró el cabildo e hizo todas las diligencias que le dictaba su sentido de responsabilidad, como caudillo de la gente que dejaba en la tierra. Completada la fundación, nombrado un lugarteniente (su hermano Hernán Pérez de Quesada) y almismo tiempo que salía para España, recibió noticias de la llegada de los ejércitos de Féderman y Belalcázar al territorio del Nuevo Reino. En esta forma ambos capitanes, según Aguado, no habían tomado parte alguna en la fundación. A Federmán lo presenta el cronista como un elemento pasivo (véase cap. XII) ; a Belalcázar, simplemente le considera un pillo. Le hace codiciar, contra todo derecho, elNuevo Reino para sí; le hace maniobrar con el “alemán” (Féderman) para echar a Jiménez de la tierra tan legítimamente ganada; hasta el último momento conspira Belalcázar, según afirma Aguado, contra ambos capitanes, a fin de dejarlos marchar a España, quedándose él de facto con la gobernación. En vano buscaríamos todas estas noticias en Castellanos, quien por el contrario hace de Belalcázar unafigura relevante y recta en todas sus actuaciones.
Nos encontramos frente a dos cronistas contemporáneos que se contradicen, tanto en lo referente a la fundación misma de Santafé como a las actuaciones de sus protagonistas.
Estas flagrantes contradicciones en que incurren dos historiadores, que escribían o preparaban sus crónicas casi simultáneamente —uno en Tunja y otro en Santafé— y sólo...
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