Te invito a coyoacan

Hoy te invito a Coyoacán, México, a la casa de una mujer, de una familia, de una pareja. Vamos al Museo Frida Kahlo, más conocido como La Casa Azul, en la esquina de Londres y Allende, en la fascinación de zona sur de la periferia de la ciudad de México.

El museo es la casa donde Frida Kahlo nació, creció, donde posteriormente vivió con su marido Diego Rivera, y donde murió, en 1954 a los 47años.
Tras los muros azul cobalto ella construyó su mundo. Aquí se respira la presencia de su fecundo espíritu creador. En 1958 La Casa Azul se abre al público como museo.  Cada año recibe más de 200 mil visitantes que buscan en este espacio a la Frida bandera de feministas, a la Frida objeto de culto, a la Frida productiva, a la Frida combativa, a la Frida mito, a la Frida apasionada yapasionante. Nos encontramos con una historia de vida, que por talento, deseo, pasión y tenacidad, logró convertir sus adversidades en una obra que la ha inmortalizado.

Además de ofrecernos una gran cantidad de colecciones y de objetos personales, esta casa nos abre una puerta al modo de la vida de estos descollantes artistas mexicanos de la primera mitad de los ‘900. En la elocuencia de sus objetos, desus cosas, podemos leer entre líneas y asomarnos tanto a algunas de sus obras como a esos perfiles privados, más íntimos, más cotidianos de sus vidas. La impronta y la presencia de este polémico matrimonio se advierte por toda la casa, en cada rincón y recodo, en el jardín, en los cuadros y en los detalles.

Frida tenía una colección de mariposas. Podemos ver su colección de vestidos, y adivinaruna mujer interesada en sus formas y su aspecto.
Se trata de una casa colonial en forma de U con un verde jardín central. En este alegre y vital espacio, poblado de ídolos pre-colombinos y de exuberante vegetación tropical, Frida jugó ruidosamente de niña y luego, ya mujer, pintó y dictó cursos a sus estudiantes, “Los Fridos”. Un toque singular es una pirámide pequeña, escalonada, hecha construirpor Rivera en el jardín para exhibir a otros ídolios pre-Colombinos.

El primer cuarto al que accedemos es una sala, donde los Rivera hacían reuniones con sus amigos, grupo internacional y heterogéneo. Entre ellos se incluían Sergei Eisenstein, Nelson Rockefeller, George Gershwin,  León Trotsky, el caricaturista Miguel Covarrubias y las actrices Dolores del Río y María Félix. Hoy es una galeríadonde podemos admirar algunos de los cuadros de Frida, como las pinturas de familia y su último trabajo, Viva la vida, una vibrante obra.

Otros cuartos contienen sus objetos pre colombianos de Tehuana y sus joyas, máscaras, otros ídolos, figuras gigantescas, piezas tradicionales.
También se exponen trabajos de Rivera, Paul Klee, José María Velasco, Clausell, Orozco y de los amigos MarcelDuchamp e Yves Tanguy. La Casa Azul es también un homenaje para el arte popular. Las esculturas en madera de Mardonio Magaña, artista descubierto por Rivera y las obras de cartonería de Carmen Caballero, son vivo ejemplo de ello.
Hay también una gran reproducción en blanco y negro de “ Las dos Frida”, pintando durante el breve período del divorcio con Rivera en 1939 (El original está en el Museo deArte Moderno en el Parque Chapultepec de Ciudad de México).

La sala y la cocina son de puro estilo mexicano. Los pisos, los suelos,  son de un amarillo fuerte, esqueletos colgando del techo, la mesa está preparada con un mantel amarillo en el cual se exponen animales en cerámica y los platos mexicanos tradicionales,  grises y marrones. Los invitados  que  se sentaron a esta mesa podíanencontrarse en compañía de 1 ó más animales, como Fulang-Chang, la queridísima mona, o el loro Bonito, listos a demostrar sus habilidades,  a cambio de un poco de manteca.
El dormitorio se sitúa cerca de la cocina. En un perchero muestran colgados, el sombrero, la chaqueta y la ropa de trabajo de Diego Rivera.

Rivera hizo construir, en un ala separada en la planta alta,  otro dormitorio para Frida...