Teatro César Vallejo

Lo que hay tras el telón de Vallejo: el fantasma cínico de la ideología en “El juicio final”

Entrar en el terreno de la biografía de César Vallejo (1892 – 1938) es, por menos decir, un acto ocioso, pues ya se contado casi todo lo revelante sobre su figura. Por ello es que entraremos exclusivamente sobre el hecho que nos interesa, su pieza teatral “El juicio final”[1] . La obra teatral deVallejo no cuenta con tantos estudios como sí su poesía, narrativa y hasta ensayos, esto debido a que aquéllas son más prolíficas dentro del currículo del escritor. Siendo “El juicio final” un entremés, prácticamente no cuenta con un acercamiento formal, por parte de la crítica, hacia él. Aquí nos detendremos en hacer una lectura basada en el psicoanálisis lacaniano — tomando en cuenta los respectivosaportes de Zizek a ésta— que no busca su análisis en los personajes en sí mismo sino en el propio texto que funciona como un modo explicativo del fantasma de la ideología[2].

Es preciso partir este trabajo definiendo los términos de fantasma, cínico e ideología. El fantasma , según Lacan, es una manifestación de lo real mediante la fantasía, es decir en relación a lo imaginario, que suele darseen el mundo simbólico, es por eso, que si bien, el fantasma esta intrínsicamente ligado al mundo imaginario, por ser una fantasía que responde alo imaginario, cualquier intento de reducirlo a la imaginación […] es una equivocación permanente. Lo importante del fantasma que cumple una función protectora, esto es cubrir al sujeto del horror de lo real, por eso es que existe un fantasma fundamentalque al tirar abajo su velo puede modificar toda la personalidad. La confrontación con el real puede llevar a un sujeto a la neurosis o en el peor de los casos convertirlo en sujeto sicótico, ahí la importancia de la función protectora del fantasma (Lacan 1957, 1960 y 1967).

La definición de cínico se la debemos a Zizek, es parte de su contribución a la epistemología lacaniana. El cínico paraZizek, apoyado en Sloterdijk, se puede reducir a la siguiente premisa: “ellos saben muy bien lo que hacen, pero aun así, lo hacen” (Sloterdijk en Zizek 1992). El cínico responde única y exclusivamente a su goce[3], pero no abandona jamás el mundo de la normal, se mantiene siempre en su postura de lo simbólico, que para él es inquebrantable discursivamente, pero en el momento del acto es capaz detransgredir hasta su propia norma con tal de gozar. Por lo tanto el cinismo es una negación de la negación, como la define el mismo Zizek. Es decir, rechaza la ley (como acto), pero al mismo tiempo rechaza el violentar la ley (como discurso). El goce cínico por ende siempre irá acompañado de un fantasma que cubra esa transgresión. El cínico anula la pregunta de por qué violentar la ley, es decir,nunca la cuestiona ni le pone trabas a ésta, solamente la transgrede anulando la pregunta de orden simbólico[4] (Zizek 1992).

La definición de ideología es a la vez extensa y reducible a la premisa: todo aquello que se esconde tras un acto, aunque parezca muy consciente, es ideología. Así es, la ideología es todo aquello que sostenemos para la realización del acto. En nuestro caso nos referimos auna ideología política. Para Zizek la ideología que prevalece es la del cinismo y asu vez ésta encuentra su ápice en la ideología política, aunque toda ideología este ligada enteramente a la fantasía, es decir, siempre esta tapando lo real, que a su vez se hace manifiesto dentro del orden simbólico[5].

Una vez aclarado estos puntos es necesario hacer algunas citas textuales del entremés deVallejo “El juicio final” para poder hacer la extrapolación necesaria y entrar al terreno que nos interesa de la literatura:

Atovof
[…] Mi pecado es el más grave
Ayúdeme, padre, a decírselo…

[…]

RULAK
¿Has asesinado?

ATOVOF
Sí, durante la revolución. He matado a Rada Pobadich, el...