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PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:
Según el Censo del año 90 el estado
Portuguesa contaba con un total de 123.773
viviendas de los cuales aproximadamente el
30% (36.403) se encontraban ubicadas en el
Área Rural.
Los porcentajes correspondientes al renglón
Rancho y Rancho Campesino son
relativamente altos con respecto al renglón
Casa, sin tomar en cuenta las condiciones de
esas viviendas y elnúmero de personas que en
ellas habitan. Es importante saber que para
esta fecha el Censo no contaba con un sistema
de información idóneo que le permitan
determinar Mapas de Pobreza, Índice de
Hacinamiento y con ello el Déficit
Habitacional. El Censo del año 2001,
perfecciona el sistema en la toma de datos, sin
embargo, hasta el momento no se ha hecho
público la información específicacorrespondiente al Estado Portuguesa, solo
cifras a nivel general, por lo que en este
estudio se toma en cuenta el Censo ’90. Sin
embargo podemos revisar datos generales de
ambos Censos y establecer relación.
Para el año 90 el Estado Portuguesa registra
123.773 viviendas y el año 2001 cuenta con
191.548 viviendas, lo que quiere decir que en
diez (10) años el número de Viviendas
aumentó en un35,5%. En el Municipio Papelón
del Estado Portuguesa la población aumentó
en un 40%, con respecto al año 90, esto puede
indicar que el crecimiento de la población no
ha sido proporcional al crecimiento de
viviendas, incidiendo aun más sobre el déficit
habitacional.
El área Rural no escapa a la realidad de
aumento del déficit habitacional, aun más
cuando estas áreas no cuentan con unapresencia marcada de programas de viviendas
y sus esfuerzos se disgregan para atender a
varios caseríos simultáneamente, no siendo
eficientes en ningunas de ellos. Con frecuencia
se puede apreciar en los caseríos rurales que
tienen características muy marcadas que le dan
identidad al área, que al ser intervenidos por la
implementación de programas de viviendas,
pierden la identidad o lamodifican, debido a
que los programas habitacionales no son
enfocados ni han sido estudiados para su
adecuada inserción en la zona. Además de no
ser constantes el número de viviendas
realizadas no cubren el déficit, y al pasar el
tiempo se aplica otro programa de igual o
distinta condición que interviene hasta que la
identidad del caserío se pierde.
Los programas de viviendas enfocadas alsector rural, no están adaptados a las
características del caserío, ni a las costumbres,
cultura y estilos de vida de los habitantes de
una región, estos programas encuentran
aceptación más por una necesidad de abrigo y
seguridad que por la comodidad que la
vivienda le puede generar. Se pueden apreciar
viviendas con un número de habitantes mayor
a la capacidad para la que fueron diseñados, ola existencia de dos o más familias por
viviendas.
La arquitecto Mercedes Marrero en su tesis
doctoral titulada “La Mampostería de Bloques
de Concreto como cerramiento Portante
(2003)”, afirma que: la propuesta tecnológica debe
asumirse como un engranaje más dentro de la
producción de vivienda, por lo que es
imprescindible su coherencia con los aspectos
culturales, ambientales, técnicos,financieros, que
aseguren su factibilidad de aplicación...” Sin
embargo, las nuevas propuestas de materiales
técnicas de construcción a menudo pasan por
alto esta concepción y en especial las
consideraciones de índole cultural inherente a
su incorporación a la práctica común.
Tal como lo expresa Aprodicio Laquean (1985)
“Aún cuando los gerentes de proyectos
intentan introducir materialesligeros y
económicos, los participantes siguen
persistiendo en el uso del cemento, bloques
huecos, y varillas de hierro. Esto sugiere que el
valor más importante en la vivienda pudiera
ser, no el control y la reglamentación de los
materiales, sino lo que los interesados pueden
realmente permitirse”.
Como parte del problema se puede plantear
que los requisitos exigidos en los programas...