TEMAS VARIADOS

Importancia de la lectura

¿En verdad es importante leer en la actualidad? Yo pienso que sí. Pero, ¿por qué nos empeñamos los maestros en que nuestros alumnos lean, si tenemos poderosos competidores (como son la televisión, los juegos de video y el Internet) que minimizan –por no decir nulifican- esta supuesta relevancia?
Recuerdo que durante mi infancia, en mi casa sólo disponíamos de unaparato de radio y de las historietas, como “Memín Pinguín” o “Lágrimas, risas y amor”. No había televisor. Cuando llegaba el día de publicación de alguna de estas historietas, ansiosos esperábamos mis hermanos y yo a que nos tocara el turno de leerlas, para enterarnos de la secuencia de cada historia, presentada por capítulos. Y los domingos, podíamos disfrutar hasta de cinco historietas al mismotiempo: las del Pato Donald y los Chicos Malos, las de Archi, de Chanoc, incluso las de Capulinita o Fantomas. Y al paso de la semana, uno podía releer una y otra vez, dosificando las frases –que eran pocas en verdad- y devorando las imágenes.
Cierto que el lenguaje presentado era muy pobre, y a veces las frases eran muy rebuscadas, sonaban falsas en esos personajes. Y además había muchos dibujosque suplían los diálogos y completaban el argumento. Pero uno estaba en contacto –aunque fuera mínimamente- con el lenguaje. Y con las ideas y sentimientos de personajes -reflejo de las personas-, en otros ambientes, no importa que fuera en un lugar y tiempo muchas veces indeterminados.
Esto no quiere decir que la lectura de historietas sea lo mejor para iniciarse en ella; va como anécdota de laforma como fue despertándose en mí el gusto por la literatura. Ya cuando adolescente, descubrí que en mi casa había muchos libros, todo un librero lleno de libros: de primaria y secundaria, por supuesto; pero la mayoría eran novelas, obras de teatro, cuentos, epopeyas... que se transformaron en un verdadero tesoro para mí: La cabaña del tío Tom, Mujercitas, Los desarraigados, leyendas del lejanooriente, por citar algunos. Para esta época ya había un televisor, pero nunca tuve verdadero gusto por verlo; no había juegos de video y menos podía disponer de una computadora. No había. De niña jugaba mucho tiempo al aire libre, pero más adelante, la lectura de casi todos estos libros me ayudó, entre otras cosas, a soportar la etapa adolescente y encontrar, en cierta forma, mi identidad.
Sipensamos que nuestros niños y adolescentes pueden tener acceso a la lectura de textos literarios, a buenos textos, su panorama no sólo se ampliaría, sino que se enriquecería enormemente. Reflexionemos sobre las siguientes cuestiones: ¿Por qué en este siglo XXI seguimos leyendo en cursos de literatura el Quijote? Se trata de una obra escrita en el siglo XVII, cuyo personaje central es un loco, dementeque cree que los molinos de viento son gigantes enemigos; que toma a una campesina de cascos ligeros como su dama que le motiva a luchar por la justicia, en bien del desvalido; y la llama con un nombre por demás tierno: Dulcinea del Toboso.
¿Por qué retomamos historias de amor escritas por William Shakespeare, también en el siglo XVII, y las seguimos recreando en un escenario o en el cine?Pensemos en “Hamlet”, en “Romero y Julieta”. ¿Por qué recurrimos cada año a la historia de “Don Juan Tenorio” para hablar de la muerte y de la salvación del alma, a la par que del amor?
Pienso que la respuesta está precisamente en que en esas grandes historias literarias se nos habla de lo que sienten, de lo que hacen, de lo que piensan y de lo que viven otras personas, no importa dónde, no importacuándo. Lo que nos llama la atención es que nos identificamos con ellos, porque seguimos sintiendo amor, pasión, celos, como Romeo; queremos vengar las injusticias, como lo hizo Hamlet; queremos que en lugar de criminales y maleantes, pudiéramos ver, como lo hizo Don Quijote de la Mancha, que se trata de buenas personas encantadas por alguien muy malo. Así, podemos estar de acuerdo con la...