Teologia

CONCILIO DE TRENTO
1545-1563

XIX Concilio Ecuménico. Papa Paulo III, Julio III, Pio IV. Contra los errores del protestantismo y por la disciplina eclesiástica.

El Concilio de Trento, el más largo de todos (duró dieciocho años), fue suspendido en varias ocasiones y se reanudó hasta su conclusión en 1563. En veintidós reuniones logró oponer una verdadera y sabia reforma de laIglesia a los excesos y a los innumerables errores de la reforma protestante.
El Concilio de Trento señala un cambio en la historia del mundo cristiano, pues muestra el dogma católico no sólo en su esplendor de verdad revelada, sino con su valor de vida sobrenatural. Conviene distinguir en él tres partes: el concilio de Paulo III, de 1545 a 1547; el concilio de Julio III, de 1549 a 1551; y,finalmente, el concilio de Pío IV, de 1661 a 1563.
La obra doctrinal del Concilio de Trento fortificó la disciplina eclesiástica frente al protestantismo, la renovó y estrechó los lazos entre el Papa y los miembros de la Iglesia.
El concilio hizo una revisión general sobre toda la doctrina, sobre las Sagradas Escrituras, sobre cada uno de los sacramentos, así como la legítimaautoridad que le asiste a la Iglesia y la misión que debe cumplir en el mundo.
La Iglesia, como Madre y Maestra de la fe, tuvo que aclarar conceptos dudosos, afianzar verdades, promulgar nuevas leyes y anunciar sanciones disciplinarias a los infractores.
En este concilio destaca la defensa de las Sagradas Escrituras, la doctrina sobre el pecado original, la santificación yla gracia, los sacramentos, especialmente sobre la Eucaristía y la Santa Misa, sobre el culto de las imágenes, las indulgencias y la condenación de los errores de Lutero.
Trento promulgó catorce decretos doctrinales y trece decretos sobre la reforma de la atención pastoral y la disciplina de la Iglesia.

ACEPTACION DE LOS LIBROS SAGRADOS Y LAS TRADICIONES DE LOS APOSTOLESEste concilio promulgó que se conserve en la Iglesia la pureza del Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo como fuente de toda verdad, contenido en los libros sagrados y en las tradiciones no escritas, transmitidas desde los apóstoles hasta nuestros días, y que la Iglesia recibe y venera por igual.
Y si alguno no recibiera como sagrados y canónicos los mismos libros íntegros contodas sus partes, tal como se han acostumbrado leer en la Iglesia Católica y que están contenidos en la antigua edición vulgata latina, y además, despreciara a conciencia las tradiciones predichas, sea anatema.



DECRETO SOBRE EL PECADO ORIGINAL

Sobre el pecado original se declaró que, si alguno afirmara que este pecado sólo dañó a Adán y no a su descendencia, que sólopara él perdió la santidad y justicia recibida por Dios y no también para nosotros, sea anatema. Pues contradice lo que dice el Apóstol: ”Por un solo hombre entro el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así a todos los hombres pasó la muerte, por cuantos todos habían pecado” (Rom 5, 12).
Si alguno niega que hayan de ser bautizados los niños recién salidos del seno maternoporque de Adán no contraen nada del pecado original, sea anatema. Esta regla de fe que es procedente de la tradición de los Apóstoles, afirma que hasta los pequeños que ningún pecado pudieron haber cometido por sí mismos, sean bautizados verdaderamente para la remisión de los pecados, para que en ellos por la regeneración se limpie lo que por la generación contrajeron. Porque quien no renace delagua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de los cielos.

DECRETO SOBRE LA JUSTIFICACION

En este concilio se expuso la verdadera doctrina acerca de la misma justificación que Cristo Jesús enseñó, los Apóstoles transmitieron y la Iglesia Católica, con la inspiración del Espíritu Santo, perpetuamente mantuvo, prohibiendo con todo rigor que nadie se atreva a creer, predicar o...