Teoría Psicoanalítica - Resumen - Punto X

10) Organizaciones (II).
1910: Sobre un tipo particular de elección de objeto en el hombre.
1914: Introducción del narcisismo. Puntos I y II.
1917: Sobre la trasposiciones de la pulsión, en particular del erotismo anal.
1932: 33ª conferencia: “La feminidad”

A) La subordinación de las pulsiones al yo. Narcisismo. El yo como unidad, el yo como objeto.
El término narcisismo era hastaentonces empleado para designar una conducta perversa.
Freud, en cambio, conjetura que es un estado universal y originario, que se presenta como una de las fases del desarrollo de la libido, situado entre el autoerotismo y el amor de objeto, en que el individuo elige a su cuerpo propio como objeto de amor.
Freud distingue un narcisismo primario y otro secundario. El primario sería el complementolibidinoso del egoísmo inherente a la pulsión de autoconservación. Algo de este narcisismo nace antes que nosotros mismos; él es posible porque ocupamos un lugar para el deseo de nuestros padres. En verdad, el concepto castración es el contrapunto del de narcisismo. Entonces, el narcisismo primario es posible gracias a que la castración femenina funcione metafóricamente. El amor parental no es otra cosaque el narcisismo redivivo de los padres, que en su transmudación al amor de objeto revela su naturaleza.
El secundario es el observado en el síntoma psicótico, que consiste en la retirada de la libido objetal hacia el yo.
La libido reversible, colocada en los objetos o retirada de ellos y concentrada en el yo, se explica por replegamiento de investiduras de objeto. Pero no toda la investiduraes reversible. Algo persiste y es considerada en su fondo como el cuerpo de la ameba.
Freud sostiene que el narcisismo secundario está presente tanto en sanos como en enfermos; también en diferentes estados, tales como el enamoramiento o la contracción de una enfermedad orgánica, con la diferencia de que el enamorado dirige su libido hacia el objeto mientras que el enfermo la dirige hacia su yo.Sin embargo, el caso del enfermo es particular: cierto proceso, muy violento, obliga a quitar la libido de los objetos; pero la libido ahora narcisista no puede hallar el camino de regreso hacia los objetos, y es este obstáculo a su movilidad lo que pasa a ser patógeno. Parece, entonces, que la acumulación de la libido narcisista no se tolera más allá de cierta medida. “Y aún podemos imaginar quese ha llegado a la investidura de objeto justamente por eso, porque el yo se vio forzado a emitir su libido a fin de no enfermar con su estasis.” El proceso patógeno es similar al de la represión y ha de concebirse como su correspondiente.

La metáfora de la ameba: seudópodos y cuerpo. El resto autoerótico.
El supuesto de un narcisismo primario sólo puede ser formulado a partir del secundario:“[…] nos vemos llevados a concebir el narcisismo que nace por replegamiento de las investiduras de objeto como un narcisismo secundario que se edifica sobre la base de otro, primario, oscurecido por múltiples influencias.”
“Nos formamos así la imagen de una originaria investidura libidinal del yo, cedida después a los objetos; empero, considerada en su fondo, ella persiste, y es a las investidurasde objeto como el cuerpo de una ameba a los seudópodos que emite.”
Las amebas consisten en un glóbulo de sustancia protoplasmática, que emite prolongaciones, los seudópodos, por donde corre su sustancia corporal. Pero pueden recoger esas prolongaciones y adoptar de nuevo la forma de glóbulo. Freud compara la emisión de las prolongaciones con el envío de libido a los objetos mientras la masaprincipal de la libido puede permanecer en el interior del yo, y supone que en condiciones normales la libido yoica se traspone sin impedimentos en libido de objeto, y esta puede recogerse de nuevo en el interior del yo.
La metáfora de la ameba nos permite pensar en dos oposiciones:
1. Una originaria investidura libidinal que persiste (pulsión del yo).
2. Algo que va y vuelve, que es cedido a...