teoria pura del derecho1

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MANUEL DE RIVACOBA EN PÁRRAFOS:
SOBRE LA TEORÍA PURA DEL DERECHO.
En el año 1982, MANUEL DE RIVACOBA publicó su enfoque sobre la denominada teoría
pura del Derecho1. No obstante, también hay párrafos distribuidos en otros estudios, que
reseñan su posición sobre el tema.
En1974, divulgó un preciso trabajo, que, como él mismo advirtió, envolvía el capítulo
de un libro mayor, que en esa época elaboraba.
Dicho trabajo, titulado El ordenamiento jurídico, abordó explayadamente la teoría
normativista, ya que, según sus propias palabras, “… tratándose, en este tema, de las
relaciones en abstracto entre las normas jurídicas, de antemano se advierte que, para
explicarlas, hade prescindirse de los mudables contenidos de éstas y que la empresa
sólo puede abordarse atendiendo al aspecto formal de las mismas.”
Continúa señalando: “Aparece como principal la concepción normativista del
ordenamiento jurídico, iniciada por Merkel, recogida de él y desarrollada luego por
Kelsen y aplicada por Verdross al problema de las relaciones del Derecho estatal con el
internacional.”
Enuna nota de dicho estudio2, anuncia su posición sobre aquélla:
“Haber expuesto con amplitud la Teoría pura del Derecho y reconocerle su importancia
para comprender la estructura lógica del ordenamiento jurídico, no significa una
aceptación plena de ella. Hay en la misma muchos puntos en los que parece difícil no
discrepar, como se pone de manifiesto en diversos pasajes de la presente obra.Evidentemente, el análisis kelseniano del aspecto lógico del Derecho es precioso, pero no
resulta factible seguirle en su reducción de éste a puras formas lógicas, prescindiendo
por completo de sus contenidos, que son, precisamente, los que dan existencia real o
individualizan a los distintos ordenamientos. Con ello, además, se imposibilita la Ciencia
del Derecho como Dogmática jurídica, esto es, comoestudio, no del Derecho positivo en
abstracto, sino de los Derechos positivos en concreto. Tampoco se puede compartir su
radical oposición a toda consideración axiológica, pues, sin necesidad de adoptar
ninguna actitud iusnaturalista, es innegable la referencia del Derecho a los valores, y
esto, en un doble sentido: de algún modo, en cuanto valores últimos o fines del Derecho
en general, e,inmediata y primordialmente, a los valores reales y concretos que
informan cada ordenamiento en particular. Su concepción acerca de la naturaleza de la
interpretación acarrea consecuencias verdaderamente graves, que se destacan al tratar

1

Véase, de RIVACOBA, Proyecciones de la teoría pura del derecho en el pensamiento penal (en el
volumen colectivo Apreciación crítica de la teoría pura del derecho,Edeval, Valparaíso, 1982, ps.
181-192). Asimismo, en el volumen Estudios de derecho penal en homenaje al profesor Jorge
Enrique Gutiérrez Anzola, coedición de Pequeño Foro y Fundación para la Investigación y Estudios
Jurídicos, Bogotá, 1983, ps. 215-227.
2

La número 40, situada en la pág. 250 de la citada publicación.
1

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la materia en el congruo lugar de este libro; y, en fin, hemos de remitirnos también a lo
que decimos a propósito de la antítesis entre Derecho público y Derecho privado, etc.”3
…
En los decenios siguientes reafirmaría tal posición en diversos artículos. En un trabajo
sobre el Código penal tipo para Iberoamérica, preparado para un encuentro penal enCórdoba, España, expresó:
“III
1. Los autores del Código tipo trabajaban en la convicción de hacerlo en lo que un
eminente penalista argentino ha llamado con exactitud y no sin sorna „inmunidad
ideológica‟ [1], esto es, pensaban que en su labor era necesario prescindir y que en
efecto prescindían de cualquier influjo doctrinal en lo filosófico o en lo político[2]. Lo
cual, bien examinado, pone de...