Teoria Robert Keohane

Desde la revocación de la "ley de hierro de los salarios", la economía ha dejado de ser la "ciencia triste". Los economistas ya no creen que la mayoría de las personas deban existir a nivel de la subsistencia sino que, por el contrario, argumentan que es posible el gradual mejoramiento de las condiciones materiales de la vida humana. No obstante, en tanto la economía se ha tornado más optimista,la política se ha vuelto más sombría. El siglo XX ha presenciado una enorme expansión de la violencia internacional real y potencial. En la economía política mundial, las oportunidades de conflicto entre los gobiernos han aumentado a medida que se ampliaba el horizonte de la acción estatal. Los mayores peligros para la economía mundial, tienen su origen en los conflictos políticos entre lasnacional.

En este contexto, la discusión acerca de la discordia y la cooperación internacional se sitúa en el centro mismo de la problemática contemporánea. Afirma el autor que si bien la cooperación internacional entre los países avanzados e industrializados desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial ha sido mayor que la cooperación internacional entre los principales Estados en cualquierotro período de la historia de duración comparable, la cooperación sigue siendo escasa con respecto a la discordia. Ello es así, sostiene, porque el rápido crecimiento de la interdependencia económica a partir de 1945, y la creciente involucración de los gobiernos en el funcionamiento de las modernas economías capitalistas, han creado más puntos de potencial fricción.
Este libro se ocupa de cómoha sido y puede ser organizada la cooperación cuando existen intereses comunes. La teoría que desarrolla da por hecha la existencia de intereses mutuos y parte de la premisa de que, a pesar de ello, la cooperación a menudo fracasa. El autor se propone diagnosticar las razones de ese fracaso, y de los ocasionales éxitos, con la esperanza de aumentar la capacidad de los hombres para prescribirremedios.
la teoría clásica de las relaciones internacionales ha dominado este campo de estudio durante el presente siglo con diversos altibajos. Salió triunfante de su confrontación con los idealistas al término de la primera guerra mundial y con los "behavioralístas", después de la segunda, y hasta ahora ha resistido el embate de los modernos "transnacionalistas" particularmente a través de losneoconservadores que encontraron su paradigma en la primera administración de Reagan y tal vez encontrarán en la segunda su epitafio. Sus principales cultivadores han constituido las figuras cimeras en la disciplina: Aron, Mongerthau, Tucker, Waltz y muchos otros. Ellos describían el sistema internacional como una inestable y débil sociedad de estados cuya condición natural era la guerra y cuyoelemento morigerador era la disuación causada por la acumulación de recursos de poder. Hadley Bull describió este estado de cosas en una.de sus últimas obras: The-anarchical saciety: a Study of Or.der in World Politics.
A partir de los años setenta el bastión de la sabiduría convencional en el campo de las relaciones internacionales comenzó a sufrir el ataque de una nueva escuela que, bajo el impactode la transformación experimentada por la realidad contemporánea, empezó a destacar sucesivamente nuevos rasgos como el papel de los actores no gubernamentales, la emergencia de una compleja red de relaciones transnacionales, el fortalecimiento de los vínculos de interdependencia entre las distintas naciones y el empleo de regímenes in- ternacionales para regular procesos globales medianteconocimientos y métodos técnicamente más sofisticados que el mero uso de la fuerza.
El último libro de Robert O. Keohane, que provocó estos comentarios, es una de las expresiones recientes de mayor importancia dentro de esta tendencia. Prosiguiendo por otros derroteros en la dirección abierta por Richard Gooper en 1968 con su libro The economics of vnt-erdependsnce, Keohane y Nye editaron en 1973 el...