terapia ocupacional y asistencia penitenciaria
Debido a que el medio es ya de por sí una característica única, la actuación se centraría tanto en la institución (procesos burocráticos y organizativos) como en el entorno social y cultural(talleres, formación, etc.)
Un capítulo aparte, pero no menos importante, lo ocupa la intervención del profesional en los terrenos terapéuticos y ocupacionales. El primero, incluye terapiasindividualizadas y grupales (actividades lúdicas, de autocuidado, psicomotricidad, creatividad, etc. y el segundo, su entorno personal y social a los que deberá volver.
En cuanto a la terapia ocupacional,merece una especial atención la estimación y arbitraje en cuanto a salidas programadas, integración, organización y posible seguimiento de su progreso ya sea con profesionales especializados, grupos ointereses del propio interno para su rehabilitación laboral.
Posible realización de informes acerca del proceso rehabilitador del interno o sobre las condiciones a nivel ocupacional del disfrute depermisos, revisiones de grado y posterior puesta en libertad.
Participación y colaboración con otros profesionales para realizar las oportunas derivaciones a recursos disponiblesextra-penitenciarios (salud mental, piso tutelado, albergue, centro de rehabilitación…) valorando la conveniencia de continuar el seguimiento de sus avances en la vida cotidiana, en colaboración con otros profesionales,sobre los recursos a su alcance tras su excarcelación.
La presencia del terapeuta ocupacional tanto en lo vinculado con la intervención directa con el interno como en lo relacionado con el centro,abarcará de igual modo a los internos en general como a aquellos que participen en un programa específico (salud mental, violencia de género, discapacidad física, agresión sexual u otros), ya que...
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