Teresa
Humildad es andar en verdad. La humildad es vernos tal cual somos; es saber y reconocer lo que valemos ante Dios. Y ¿qué valemos ante Dios? ¿Qué somos ante Dios?
El mundo nos vende la idea de que los primeros puestos son los mejores, de que las glorias humanas y los reconocimientos humanos son muy importantes, de que los privilegios y el poder son muy necesarios, de quecreernos más es una gran cosa. Como vemos: todo lo contrario a lo que significa la humildad.
San Ignacio define la humildad como la renuncia de tres cosas: renuncia a la propia voluntad, renuncia al propio interés, y renuncia al propio amor. El Señor nos recomienda en el Evangelio (Lc. 14, 1.7-14) evitar los primeros puestos. Y los primeros puestos se refieren a esas cosas que nos vende elmundo: glorias, alabanzas, reconocimientos, poder, mando, honores, privilegios, creerse grande, querer ser grande y poderoso, alardear de lo mucho que sabemos, creer que podemos sin Dios, buscar ser reconocido, hacer las cosas para que nos crean muy buenos y muy capaces, creernos mejores que los demás, creernos que somos una gran cosa, creer que merecemos lo que tenemos y muchas cosas más, tratar dedestacarnos, confiar en las propias fuerzas y no en Dios, buscar hacer nuestra propia voluntad y no la de Dios, etc., etc. ... Todas estas cosas nos las vende el mundo.
Pero la humildad es todo lo contrario: es hacer las cosas porque Dios las quiere y como Dios las quiere, no por destacarnos, ni por lograr reconocimientos; es buscar la gloria de Dios y no la propia; es no buscar, ni reclamarhonores ni reconocimientos; es no hablar de uno mismo, ni alardear lo mucho que somos y tenemos; es saber que nada podemos sin Dios; es saber y reconocer que somos totalmente dependientes de Dios; es dar gracias a Dios por lo que somos, por lo que hacemos y por lo que tenemos; es saber que nada podemos sin Dios, pues nuestra fuerza está en Dios. Es creer, de verdad, que nada somos ante Dios.
Sinembargo, debemos tener en cuenta que la humildad no consiste en negar las cualidades que Dios nos ha dado –eso sería falsa humildad y no sería “andar en verdad”. La humildad consiste en saber y en reconocer que todo nos es dado por Dios. Lo que sucede es que el orgullo nos hace creer que esas cosas las logramos nosotros mismos.
Y, debemos recordar que el Señor ha hecho una grave advertencia: elorgulloso será humillado. Se trata, entonces, de andar en verdad, para poder recibir el trato que el Señor promete a los humildes: “el que se humilla será engrandecido”.
El desasimiento y la humildad andan siempre juntas…[1] porque su fundamento es en ser tan amadas de nuestro Enseñador Cristo, que nunca un punto se vio sin ellas[2]. El Buen Jesús vivía del todo para Dios y esa era su verdad.Teresa de Jesús plantea en el camino de la oración es necesario tener como fundamento la virtud de la humildad, sin ésta, es indiscutible que la oración sea verdadera, porque en ella se encuentra la verdad de sí. La humildad se opone al camino del egoísmo, del orgullo y de la soberbia, son máscaras que cubren la realidad de mentira que oculta la verdad y la realidad de la persona. Por eso, lahumildad es trabajo grande… porque es guerra contra nosotros mismos[3] La conciencia quien se adentra en un camino de entrega a Dios, es pensar en un hecho: que se ha entregado a Dios; sin embargo, hay muchas conductas internas y externas que, por más que se quiera encubrir, no vive lo que ha prometido. De estas situaciones se generan engaños contra sí mismo y contra los demás.
Viene la educaciónde la virtud de la humildad para dar guerra a esta barrera del egoísmo y de la soberbia por medio del obrar de Dios que hácela tantas mercedes, que todo le parece poco cuanto se puede hacer en esta vida.[4] En lo exterior se puede mostrar bien estas acciones de Dios, tratando de hacer las cosas de la mejor manera, sin embargo, en lo interior está lo más difícil, por lo tanto, el remedio está en...
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