Tertulias de Bioética

Tertulias de Bioética
Ensayo de los primeros cuatro capítulos

El ser humano es, instintivamente, gregario. Una de las características principales del género humano es la necesidad de convivir con miembros de la misma especia para asegurar la sobrevivencia de cada individuo. De igual manera, es un ser que tiende, naturalmente, a ayudar a sus semejantes.
Sin embargo, este comportamiento no esdel todo resultado de un proceso de adaptación evolutiva. Una de las características más importantes del ser humano es la posibilidad de razonar el entorno y formularse preguntas trascendentales respecto de su origen y su destino. Esta situación permite entender que el ser humano sea capaz de razonar la relación con el entorno, aumenta la capacidad de soporte y ayuda mutua, pero también da lacapacidad de hacer daño sin razón.
Dentro de las primeras páginas, el autor menciona una frase que tiene una gran relevancia, por lo menos en un ámbito personal: “Lo característico de lo humano no está en situarse por encima de otras especies animales, sino en la doble posibilidad de colocarse en un plano superior o en otro inferior. No hacen los humanos el amor mejor que otras especies, sino queestán abiertos a la posibilidad doble de hacerlo mejor o peor, con más ternura benevolente o con más posesividad egoísta”. Esta frase encierra la naturaleza misma del homo sapiens; un ser de contrastes, una especie que, sin ser el dueño del planeta, tiene una enorme responsabilidad como guardián del orden y del equilibrio mundial; esta responsabilidad deriva de la capacidad de razonamiento yabstracción.
Cuando el ser humano se plantea dudas respecto de su origen, inevitablemente se tiene que hacer un análisis de la historia (lo que el autor llama una biografía) y de una trayectoria biológica. Estas circunstancias son analizadas por medio de la ética, y es por medio de estas situaciones que puede definirse a la bioética.
En un momento de la lectura, el autor argumenta (como clérigo) que laIglesia jamás ha impuesto a sus fieles la prohibición de pensar. Así, el título del segundo capítulo, “Creer y Pensar”, se pretende dar a entender la existencia de un equilibrio entre la fe y la intelectualidad Es en ese momento cuando el autor comienza con el razonamiento cristiano de la bioética.
Respecto de los grandes avances tecnológicos, el autor menciona la existencia de cinco verbos quedeben de regir la perspectiva del progreso de la ciencia: admirar, agradecer, mejorar, curar y proteger. Estos verbos deben de entenderse desde una perspectiva ética. En este sentido se concluye que la bioética no obliga al individuo a rechazar “a ultranza” los progresos tecnológicos, sino que invita a su apreciación y valoración. La actitud teológica fundamental en bioética se resume en dospalabras: gratitud y responsabilidad, en virtud de que toda vida que brota de la tierra es un bien, mismo que debe de agradecerse y distribuirse de acuerdo a un razonamiento ético de las necesidades de cada ser humano.
En ese sentido un teólogo (y, personalmente, considero que todos) debe de considerar la promoción de la vida y la protección de los seres vivientes. Para esto, tiene que entenderse queel progreso científico no es antagónico de la postura religiosa. Todo científico busca el mejoramiento de la vida humana mediante el progreso tecnológico, al igual que el teólogo busca el mejoramiento de la vida mediante el perfeccionamiento espiritual. Ambos hombres de ciencia se embarcan en una búsqueda filosófica por el bien común. El teólogo también debe de buscar el aprovechamientotecnológico que signifique un avance general. Sin embargo, ambos puntos de vista parecen separarse más en la práctica, como lo sucedido con el aborto.
Uno de los momentos más importantes de la lectura es cuando habla respecto de la situación en España, respecto de los debates éticos. Menciona el autor la existencia de grandes contradicciones entre argumentos y quienes los realizan. Por una parte está la...