testimonio de María

TESTIMONIO:

Hola, Dios les bendiga, soy una adolescente de 17 años que asisto a la iglesia desde muy pequeña, como niña yo amaba a Dios viniendo alegremente a la casa del Señor con mi madre, peroal llegar a mi adolescencia comencé a amar más al mundo y sus vanidades que al Dios Creador, locamente pensaba y veía las cosas de Dios aburridas y algo que me molestaba y avergonzaba de la iglesiaera vestirme como una verdadera cristiana, me gustaba mucho vestir con pantalones, venía a la iglesia con falda larga pero llegando a casa y para cualquier actividad vestía con pantalones, dejar estoera para mí demasiado difícil y lejano. Recuerdo que se realizaron retiros espirituales para adolescentes, me llené de curiosidad por saber cómo eran además me ofrecieron ir así que asistí, sin haberloplaneado Dios me hizo sentir Su presencia mientras la gloria de Dios se derramaba y quebranté mi corazón a Dios prometiéndole que le amaba así el Señor me concedió la promesa del Espíritu Santo,regresé muy contenta pero al poco tiempo olvidé mis promesas y sin darme cuenta me embarré nuevamente en mi pecado, así llegaron otros retiros en los que recibía otra vez hermosas bendiciones espiritualespero lamentablemente no tomé los caminos del Señor con la importancia que se merece pues el diablo me engañaba y volvía a caer en lo mismo. Bien dice la palabra del Señor “Dios no puede ser burlado”,pronto comencé a tener perturbaciones, no podía dormir, esto ya me había pasado poco tiempo atrás por la misma razón pero por ser leves, es decir era por corto tiempo, no hacía caso a talesadvertencias; esta vez era distinto, esta vez no podía dormir no solo por una noche sino por varias noches, estaba nerviosa, sentía que entraría a la locura, me enfermé, recién ahí reaccioné y comencé a pedirayuda a Dios pues sabía que Él era el único que me podía ayudar y así lo hizo, continué en mi búsqueda al Señor y él me fue liberando de todos los males que me aquejaban, así mi alma fue libre del...