Thomas Catan

La Cámara Federal defendió el secreto profesional de los periodistas, en un escrito en el que declaró nula una resolución del juez federal Claudio Bonadio por la que había ordenado confeccionar un listado de llamadas entrantes y salientes de los teléfonos del corresponsal del Financial Times, Thomas Catan.

Los camaristas, para que no se avanzara más en la violación del secreto profesionalperiodístico de Catan —consagrado por el artículo 43 de la Constitución— también ordenaron a Bonadio que "se proceda a la destrucción (del listado) en presencia del interesado o sus abogados".

La sala II de la Cámara, integrada por los camaristas Horacio Cattani, Eduardo Luraschi y Martín Irurzun, sentó aquel precedente jurídico clave para el ejercicio de la libertad de expresión en la causa en quese investiga un supuesto pedido de coima de parte de senadores a banqueros para que no se tratara una ley que interesaba a los bancos.

Mientas tanto, la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado recibirá el jueves el demorado testimonio del presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, e intentará así reavivar la investigación paralela que realiza sobre este caso.

La pista que siguen lossenadores se relaciona a la vinculación que podría tener en el escándalo el lobbista Carlos Bercún, quien fue contratado simultáneamente por el Central, Economía y entidades bancarias para suministrarles información sensible sobre proyectos parlamentarios vinculados al área económica.

Pero el fallo de la Cámara también defiende el secreto profesional que es clave en la tarea periodística porquelos periodistas obtienen muchas veces información de sus fuentes sólo bajo el compromiso de no identificarlas para que no sean amenazadas o sufran otro tipo de persecución.

Sobre todo porque el Congreso argentino lleva años sin sancionar una ley que disponga el libre acceso a los documentos públicos, como la "Freedom Information Act (FOIA)" de los EE.UU. Sin esa ley, los funcionarios de turnomanejan con discreción la divulgación de documentos públicos y es más necesaria la consulta a fuentes de información.

Bonadio había conseguido la lista de las llamadas que hizo y recibió el periodista con la idea de tratar de determinar así quién le había contado sobre la existencia del supuesto pedido de soborno.

La decisión de Bonadio había abierto un debate sobre si se puede limitar el secretoprofesional de los periodistas cuando la Justicia Penal necesita pruebas para avanzar en sus investigaciones .

La Cámara dijo que éste no es un caso extremo donde otro derecho obligue a hacer necesaria la restricción del derecho al secreto profesional, en estos términos:

La "restricción a la protección del secreto de la fuente" no resultó "necesaria", sino que, por el contrario, "resultócompletamente innecesaria", ya que Bonadio había dispuesto otras medidas como allanamientos o declaraciones testimoniales.

"Resulta innecesario afectar el secreto de las fuentes de información de Catan con el objeto de reunir elementos útiles ya que existen otras alternativas probatorias" por lo que la medida "constituye una restricción irrazonable de la libertad de expresión" .

"Las consideracionesdeben ser tomadas en cuanto inclinan la balanza de los intereses en juego en favor del interés de la sociedad democrática en asegurar la libertad de prensa".

Los camaristas declararon así nula la decisión de Bonadio y también hicieron lugar a una presentación del titular de la asociación "Periodistas", Horacio Verbitsky y de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa, quienes invocaron lafigura del "amicus curiae", es decir "amigo de la Justicia" y así se sumaron al pedido de Catan para defender su secreto profesional y dejar sentado este precedente clave para otros casos.

En el caso del periodista Tomas Catan la Cámara Nacional Federal Criminal y Correccional Sala II, ingresó en la consideración del conflicto planteado entre el interés del Estado en esclarecer un presunto...