tlacaelel
Antonio Velasco Piña
Tlacaélel
El Azteca entre los aztecas
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ISBN 970-07-3439-0(Rústica) ISBN 970-07-3330-0 (Tela)
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ÍNDICE
Capítulo I 5
Capítulo II 9
Capítulo III 13
Capítulo IV 16
Capítulo V 20
Capítulo VI 23
Capítulo VII 25
Capítulo VIII 29
Capítulo IX 34
Capítulo X 38
Capítulo XI 43
Capítulo XII 55
Capítulo XIII 62
Capítulo XIV 77
Capítulo XV 82
Capítulo XVI 91
Capítulo XVII 97
Capítulo XVIII 108Capítulo XIX 116
Capítulo XX 133
Capítulo XXI 138
Capítulo XXII 147
A la memoria de mi hermano Miguel
A Gaby mi esposa
A Carlos Miguel mi hijo
"...oquipan oquimatian mochiuh in tlacatl
catea initoca Tlacayelleltzin Cihuacohuatl in
cemanahuac tepehuan".
"...y esto ocurrió en la época
del señor Tlacaélel; el
Cihuacóatl, el Conquistador
del Universo".
CrónicaMexicáyotl, de Fernando Alvarado Tezozómoc.
Capítulo I
EL EMBLEMA SAGRADO DE QUETZALCOATL
Tlacaélel recorrió lentamente con la mirada el fascinante espectáculo que se ofrecía ante su vista:
En el amplio patio interior del templo principal de Chololan, al pie de la gigantesca y antiquísima pirámide, estaba celebrándose la ceremonia de iniciaciónde los nuevos sacerdotes de Quetzalcóatl.
La luz de más de un centenar de antorchas, en las que ardían aromáticas esencias, iluminaba el recinto con cambiantes tonalidades. Una doble hilera de sacerdotes, alineados en ambos costados del patio, entonaban con rítmico acento antiguos himnos sagrados. Centeotl, el anciano sumo sacerdote, oficiaba la ceremonia ostentando sobre su pecho" el máximosímbolo de la jerarquía religiosa: el Emblema Sagrado de Quetzalcóatl. En el centro del patio, dentro de un enorme círculo de pintura blanca, se encontraba el pequeño grupo de jóvenes —entre los cuales estaba el, propio Tlacaélel— que recibirían en aquella ocasión el alto honor de entrar a formar parte del denominado sacerdocio blanco, consagrado al culto de Quetzalcóatl.
Para los jóvenes que en mediodel complicado ceremonial iban siendo ungidos por el sumo sacerdote, aquel acto constituía la culminación de una meta largamente soñada, y lograda a través de varios años de incesantes esfuerzos.
De entre varios miles de adolescentes que en todas las comunidades náhuatl aspiraban a ser admitidos en el templo de Chololan, se escogía cada cinco años a cincuenta y dos candidatos. El criterioselectivo resultaba riguroso en extremo; no sólo era necesario poseer una conducta ejemplar desde la infancia y contar con amplias recomendaciones de los principales sacerdotes de la comunidad donde habitaban, sino que además, debían salir airosos de las difíciles pruebas que los sacerdotes de Quetzalcóatl imponían para valorar la capacidad de los aspirantes.
La extrema dureza de los sistemas deenseñanza utilizados en el templo de Chololan, motivaba una considerable deserción a lo largo de los cinco años del noviciado, por lo que rara vez lograban ingresar como nuevos miembros de la Hermandad Blanca más de media docena de jóvenes.
Una vez investidos con la prestigiada dignidad de sacerdotes de Quetzalcóatl, los así ungidos regresaban a sus lugares de origen, donde muy pronto ocupaban puestosrelevantes, ya fuera como jefes militares y dirigentes eclesiásticos, o incluso como reyes de los múltiples y pequeños señoríos en que había quedado fragmentado el mundo náhuatl tras la desaparición, ocurrida varios siglos atrás, del poderoso Imperio Tolteca.
Diversas circunstancias singularizaban al grupo de novicios que en aquella ocasión estaban siendo ordenados como sacerdotes de...
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