Todos
- Oigan el viento – dijo el señor White; que, habiendo cometido un error fatal, y antes que fuera muy tarde, trataba que su hijo no lo advirtiera.
- Lo oigo – dijo ésteúltimo, examinando sombríamente el tablero mientras estiraba su mano. – Jaque.
- No creo que venga esta noche – dijo su padre con la mano lista sobre el tablero.
-Mate – contestó el hijo.
-Esto es lo malo de vivir tan lejos -vociferó el señor White con imprevista y repentina violencia; – de todos los lugares alejados, bestiales, barrosos para vivir, éste es el peor. El sendero es unpantano, el camino es un torrente. No se en qué piensa la gente
Afuera, la noche era fría y húmeda, pero en la pequeña sala de Vila Laburnum los postigos estaban cerrados y el fuego ardía vivamente. Padree hijo jugaban al ajedrez. El primero, que tenía ideas personales sobre el juego que suponían cambios radicales, ponía al rey en tan desesperados e inútiles peligros que incluso provocabancomentarios de la vieja señora de cabello blanco que tejía plácidamente junto a la chimenea.
- Oigan el viento – dijo el señor White; que, habiendo cometido un error fatal, y antes que fuera muy tarde,trataba que su hijo no lo advirtiera.
- Lo oigo – dijo éste último, examinando sombríamente el tablero mientras estiraba su mano. – Jaque.
- No creo que venga esta noche – dijo su padre con la manolista sobre el tablero.
-Mate – contestó el hijo.
- Esto es lo malo de vivir tan lejos -vociferó el señor White con imprevista y repentina violencia; – de todos los lugares alejados,...
Regístrate para leer el documento completo.