toma de decisiones

Pinchot, G. (1985). El nuevo espíritu empresarial interno. En Intrapreneuring [el empresario dentro
de la empresa: cómo hacerse empresario sin salirse de la empresa] (pp.3-30). Bogotá : Norma.
(C27049)

CAPITULO 1

El nuevo espíritu
empresarial interno
¡Buenas noticias! Aun cuando una buena parte de la industria
norteamericana haya perdido terreno en la competencia internacional, nuestrosector empresarial es la envidia del mundo. Los
japoneses, que hace veinte años venían a los Estados Unidos a
estudiar el milagro de la administración norteamericana, hoy
vienen a estudiar nuestro sistema de capital de especulación.
De cualquier manera que se mida, la actividad empresarial
norteamericana está en aumento. Los negocios nuevos, que surgían a razón de 1800 por día en 1950, y 4000 en 1960, aumentaron
a 12000 diarios en 1983. De 1970 a 1980 los negocios pequefios
agregaron 20 millones de empleos nuevos, mientras que las compañías que figuran entre las 500 de Fortune no agregaron ninguno.
Estas últimas compañías perdieron tres millones de empleos de
1980 a 1983 mientras que las compaftías de menos de diez años de
edad agregaron 750000.*
El vigor de ese espíritu deempresa es el mayor tesoro de los
negocios de los Estados Unidos. Nuestras fantasías infantiles todavía se refieren más al dominio de un vasto territorio virgen y a
libertarse de la tiranía, que a avanzar hacia las alturas de vastas
organizaciones. A diferencia del Japón y de la mayor parte de las
naciones europeas, carecemos de una cultura homogénea y de la
predisposición a la deferencia a laautoridad, lo cual hace que nos
sea muy difícil aceptar el papel de respetables piftones en una gran
máquina industrial. Poseemos en cambio el espíritu de autoconfianza, aventura y disposición para ensayar cosas nuevas, con la
consecuencia de que si no somos muy aptos para dejarnos reglamentar, en cambio nos sobra el espíritu de empresa.
En estos tiempos de rápido cambio económico ytecnológico,
este espíritu puede ser una ventaja exclusiva e importante, pero
solo si aprendemos a utilizarlo; y la actividad empresarial interna
es un método de utilizarlo alli donde se encuentran nuestros mejores recursos e individuos: en las grandes organizaciones.

• David Bireh, direetor del Programa eobre el Cambio V~inal y Regional de MIT, Cambridge, M&M.

Mate rial didáctico reproducido e nESAN poro su uso excl usivo e n clase.

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Los empresarios internos

Durante algún tiempo no fueron buenas las perspectivas para
el espíritu de empresa en los Estados U nidos. En la década de 1960
una buena parte de nuestra sociedad deploraba la grandeza de
tamafio, y sin embargo todo el mundo preveía para el futuro menos
organizacion es pero demayor tamafio. En 1870 el 80% de los.
norteamerica nos trabajaban por cuenta propia mientras que hoy
esa proporción es solo del 7% a pesar de que, según Mil ton Stewart,
director del Inc. Magazine, siete veces ese número quisieran ser
independientes.* Aun cuando la marea ha vuelto a dirigirse a lo
pequefio, el 50% de la población sigue trabajando en compafiías de
más de 100 personas.**Nuestra sociedad está atrapada en un tira y afloja entre lo
grande y lo pequefio. Anhelamos las satisfacciones personales, la
independenc ia y la libertad de las organizacion es pequefias, pero
no podemos volver a ser una nación de pequeños propietarios
porque las tareas de la sociedad moderna son demasiado complejas para ello. Si bien es cierto que hemos sobreestimad o mucho las
ventajas de logrande, tareas como la fabricación de automóviles o
transbordad ores espaciales, y hasta la distribución de jabón, se
realizan con mayor eficiencia en una escala relativament e grande.
Lo que se necesita es una manera de aprovechar las ventajas tanto
de lo grande como de lo pequeño al mismo tiempo.
Entre los muchos modos de combinar lo grande y lo pequefio se
cuentan los contratos de...