Tourette

Para citar: 1. DE LA ROSA MORENO, L. (2007). Mujeres y personas con discapacidad: grupos definidos por terceros. En M. G. Arenas, M. J. Gómez y E. Jurado (Coord.). Pensando la educación desde las mujeres. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Málaga (Colección Atenea). Páginas, inicial: 305; final: 322. I.S.B.N. 978-84-9747-183-1.


MUJERES Y PERSONAS CON DISCAPACIDAD:GRUPOS DEFINIDOS POR TERCEROS

Lourdes De la Rosa






Resumen

Expresaré, en primer lugar, la relación percibida entre los colectivos de personas con discapacidad y mujeres; todo ello, desde la vivencia personal de la autora de este escrito. Ello supondrá hablar de la importancia que supone irme reconociendo como persona con múltiples identidades... para hablar y acercarme a otrasrealidades personales.
Posteriormente, destacaré algunas barreras para el desarrollo personal y social con las que nos encontramos las personas con discapacidad y las mujeres que, desde mi criterio, presentan ciertas similitudes.
Surgirán entonces algunas modestas sugerencias de cómo ir saliendo del ojo del huracán, cuyo espectacular movimiento, a veces, oculta la inmovilidad interna.
Pasaré, enel siguiente apartado, a compartir algunos nuevos problemas que surgen de los planteamientos o relaciones establecidas.
Y ya, para finalizar, mencionaré a algunas personas que van haciendo posible pequeñas, pero importantes, mejoras en la calidad de vida de las personas con discapacidad y de las mujeres.

Por qué relacionar a las mujeres y a las personas con discapacidad

Me interesa, enprimer lugar, dejar claro que no voy a aportar reflexiones en relación a las mujeres con discapacidad, sino que mi intención con este texto es compartir ideas, emociones, descubrimientos (no quiero decir que yo sea la primera en “darse cuenta”, sino que “también yo” los he descubierto) sobre las frecuentes similitudes que se dan en algunas de las situaciones que viven las mujeres y las personascon discapacidad y sobre lo que un grupo puede aprender del otro en el largo proceso de emancipación y empoderamiento.
Hablaré pues, de mujeres y de personas con discapacidad: hablaré de mí. Sí, como mujer que soy (¿soy lo que dicen que soy?), pero también hablaré de mí al hacerlo de las personas con discapacidad porque, desde una perspectiva intercultural, “soy ellas” al haber crecido comopersona en la interacción mutua y porque asumo que la situación actual de las personas con discapacidad no es independiente de mí (¿son quienes creo que son?). También, en último término, hablaré de mí como persona con discapacidad, ya que, si nada cambia y en el mejor de los casos, espero llegar a vieja y entonces probablemente seré mujer, mayor y discapacitada (por eso, con un simbolismo irónico yreivindicativo, la escritora Susan Peters –1998-, autora con discapacidad, nos nombra a los que no lo somos como “personas temporalmente no discapacitadas”). Así que, con lo dicho hasta aquí, se destacan dos ideas centrales: una, el tomar conciencia del hecho de pertenecer a múltiples grupos conforma mi identidad y, dos, que a las mujeres y a las personas con discapacidad “nos dicen otros lo quesomos” en relación a ellos mismos.
Aún más: mi situación en relación al poder, si hablamos de mujeres o de personas con discapacidad, no siempre es la misma. En el tema que nos ocupa, en mi identidad de mujer pertenezco a un grupo que sufre discriminación estructural, pero en relación a las personas con discapacidad formo parte del grupo hegemónico que recibe privilegios indirectamente al noasegurárseles los derechos a éstas (podríamos pensar en un mundo de personas ciegas en el que éstas adecuaran los entornos a sus capacidades auditivas y tactiles preferentes pero no a las mías visuales –por ejemplo, disponer de sistemas de luz artificial-, lo que haría que llegado el crepúsculo yo me desenvolviera de una manera menos funcional que ellos y ellas por no ser considerada mi diversidad...