Trabajo Extraclase
Páginas: 5 (1160 palabras)
Publicado: 29 de mayo de 2012
Defensa Espiritual 20 de enero de 2012
Queridos Amigos del Camino:
¿Sabes que tienes un enemigo que quiere robarte, matarte y destruirte? Juan 10:10 declara que “el ladrón sólo viene para robar, matar y destruir…” El ladrón en este pasaje es el Diablo. ¿Qué te puede robar si pecas? Tu gozo, tu paz, tu comunión con Dios y con otros (si el pecado les afecta también). ¿Crees esto?Parece que muchos no lo creen porque pecan y siguen como si nada ha cambiado.
¿Qué puede matar el diablo? Tu testimonio, tu servicio a Dios, tus planes para el futuro, tus deseos de ser santo, justo y semejante a Cristo. Créeme, amigo, lo he visto demasiadas veces y sé que es cierto. Una de las tragedias verdaderas de la vida es ver a un cristiano activo y fructífero reducido a un pobre,miserable, estéril sombra de lo que era.
¿Qué puede destruir? Tu familia, tu lugar de liderazgo y servicio en el Cuerpo de Cristo, tu confianza en el Señor y a veces hasta tu fe en El. Los que tenemos muchos años en el ministerio lo hemos observado (y sufrido profundamente) tantas veces que nos avergüenza y nos aflige el alma.
Esta palabra de Jesucristo nos debería advertir de este peligropersonalmente, pues, todos somos “capaces” de cualquiera de estos destinos si no tenemos una defensa espiritual fuerte. Las naciones más poderosas del mundo necesitan y construyen sistemas de defensa contra toda clase de ataque enemigo: contra ataques aéreos, terrestres, del mar, y aún desde adentro. Los países modernos tienen que tomar decisiones y diseñar planes para defenderse. ¿Por qué no lohacemos los cristianos?
Mi trabajo en mis años de servicio militar era coordinar las defensas contra ataques aéreos que podrían venir contra las bases militares en la isla de Okinawa en el Mar de Japón Se gastaron millones de dólares en esas defensas. Tanto la Fuerza Aérea como las terrestres estábamos en alerta 24-7. Todo esto porque Okinawa era una pieza clave en un sistema defensivo que cubríamiles de kilómetros de territorios que temían un ataque similar al de Pearl Harbor en 1941. Japón tomó por sorpresa a las fuerzas militares estadounidenses a pesar de reportes de la inteligencia militar de un peligro eminente que deberían haber alertado a los comandantes. En 1955 y ’56 el peligro era muy grande y querían estar preparados en caso de un ataque similar. Gracias a Dios nunca sucedió,quizá porque estábamos preparados.
La Biblia describe a Satanás como un león que anda al acecho, o sea, alrededor de su presa, buscando la oportunidad de atacar y devorar al desprevenido (I Pedro 5:9). Sus rugidos son para infundir pavor a su presa para que corra y sea agarrada por las leonas más veloces. El Diablo busca a los cristianos que no están en una posición de defensa natural, o tratade hacerles salir de su posición. Nuestra posición segura es estar en Cristo. Nuestra defensa es permanecer en Cristo, firmes en la fe (I Pedro 5:10). Huir de Él sería fatal porque el pánico nos haría caer en sus trampas. Recuerda, amigo, la promesa de I Juan 3:6: “Todo aquel que permanece en El, no peca…” Más bien, cuando nos sometemos al Señor, podemos resistir al Diablo y él huirá de nosotros(Sant. 4:7).
Cuando estamos permaneciendo en Dios, tenemos una sensibilidad espiritual más perceptible y podemos reconocer áreas de peligro en nuestra vida antes de que suceda el ataque, y así podemos prepararnos a tiempo. Por ejemplo, pequeñas molestias que sentimos en nuestra relación con otra persona
nos advierten del peligro de un ataque de ira. O la atracción física por alguiendel sexo opuesto nos advierte del peligro de un ataque serio en esa área de la vida. O unos pensamientos no bien controlados pueden conducir a actos de deshonestidad en los negocios. En fin, son incontables los ejemplos de las pequeñas fallas en nuestro sistema defensivo que nos hacen vulnerables a ataques GRANDES Y SERIOS. Recuerda, amigo, son las pequeñas zorras que arruinan las viñas...
Queridos Amigos del Camino:
¿Sabes que tienes un enemigo que quiere robarte, matarte y destruirte? Juan 10:10 declara que “el ladrón sólo viene para robar, matar y destruir…” El ladrón en este pasaje es el Diablo. ¿Qué te puede robar si pecas? Tu gozo, tu paz, tu comunión con Dios y con otros (si el pecado les afecta también). ¿Crees esto?Parece que muchos no lo creen porque pecan y siguen como si nada ha cambiado.
¿Qué puede matar el diablo? Tu testimonio, tu servicio a Dios, tus planes para el futuro, tus deseos de ser santo, justo y semejante a Cristo. Créeme, amigo, lo he visto demasiadas veces y sé que es cierto. Una de las tragedias verdaderas de la vida es ver a un cristiano activo y fructífero reducido a un pobre,miserable, estéril sombra de lo que era.
¿Qué puede destruir? Tu familia, tu lugar de liderazgo y servicio en el Cuerpo de Cristo, tu confianza en el Señor y a veces hasta tu fe en El. Los que tenemos muchos años en el ministerio lo hemos observado (y sufrido profundamente) tantas veces que nos avergüenza y nos aflige el alma.
Esta palabra de Jesucristo nos debería advertir de este peligropersonalmente, pues, todos somos “capaces” de cualquiera de estos destinos si no tenemos una defensa espiritual fuerte. Las naciones más poderosas del mundo necesitan y construyen sistemas de defensa contra toda clase de ataque enemigo: contra ataques aéreos, terrestres, del mar, y aún desde adentro. Los países modernos tienen que tomar decisiones y diseñar planes para defenderse. ¿Por qué no lohacemos los cristianos?
Mi trabajo en mis años de servicio militar era coordinar las defensas contra ataques aéreos que podrían venir contra las bases militares en la isla de Okinawa en el Mar de Japón Se gastaron millones de dólares en esas defensas. Tanto la Fuerza Aérea como las terrestres estábamos en alerta 24-7. Todo esto porque Okinawa era una pieza clave en un sistema defensivo que cubríamiles de kilómetros de territorios que temían un ataque similar al de Pearl Harbor en 1941. Japón tomó por sorpresa a las fuerzas militares estadounidenses a pesar de reportes de la inteligencia militar de un peligro eminente que deberían haber alertado a los comandantes. En 1955 y ’56 el peligro era muy grande y querían estar preparados en caso de un ataque similar. Gracias a Dios nunca sucedió,quizá porque estábamos preparados.
La Biblia describe a Satanás como un león que anda al acecho, o sea, alrededor de su presa, buscando la oportunidad de atacar y devorar al desprevenido (I Pedro 5:9). Sus rugidos son para infundir pavor a su presa para que corra y sea agarrada por las leonas más veloces. El Diablo busca a los cristianos que no están en una posición de defensa natural, o tratade hacerles salir de su posición. Nuestra posición segura es estar en Cristo. Nuestra defensa es permanecer en Cristo, firmes en la fe (I Pedro 5:10). Huir de Él sería fatal porque el pánico nos haría caer en sus trampas. Recuerda, amigo, la promesa de I Juan 3:6: “Todo aquel que permanece en El, no peca…” Más bien, cuando nos sometemos al Señor, podemos resistir al Diablo y él huirá de nosotros(Sant. 4:7).
Cuando estamos permaneciendo en Dios, tenemos una sensibilidad espiritual más perceptible y podemos reconocer áreas de peligro en nuestra vida antes de que suceda el ataque, y así podemos prepararnos a tiempo. Por ejemplo, pequeñas molestias que sentimos en nuestra relación con otra persona
nos advierten del peligro de un ataque de ira. O la atracción física por alguiendel sexo opuesto nos advierte del peligro de un ataque serio en esa área de la vida. O unos pensamientos no bien controlados pueden conducir a actos de deshonestidad en los negocios. En fin, son incontables los ejemplos de las pequeñas fallas en nuestro sistema defensivo que nos hacen vulnerables a ataques GRANDES Y SERIOS. Recuerda, amigo, son las pequeñas zorras que arruinan las viñas...
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