TRABAJO PROBLEMAS EN EL ARTE
Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria
Universidad Nacional Experimental para la Artes
Cátedra de Solución de Problemas en el Arte
Profesor: Nelson Hurtado
LA
INCIDENCIA DE LA SOCIEDAD SOBRE LA ACTITUD DEL
ARTISTA FRENTE AL DESARROLLO Y OCUPACIÓN DE LA
PROFESIÓN DE LA ARTES. Informe del análisis de datos de la aplicación del instrumento de medición sobre el
problema planteado.
Ellein Herrera.
V2052819
Keyla Guerrero.
V22354153
Yosmely Mercado.
V 25237988
Jestzú Moreno.
V 25626724
Caracas, 10 de Octubre del 2014.
SOLUCIÓN DE PROBLEMAS EN EL ARTE.
“
El
arte en sí mismo carece de problemas, son las personas que lo crean o desean
acceder a él las que tienen problemas.”
✓Sobre la actitud del artista como fenómeno individual.
La actitud es una de las sustancias más importantes para poder ser un artista,
¿por qué? Pues sin ella simplemente perdemos muchas cosas, de nada vale tener
un gran talento y, en el caso de los músicos, ejecutar muy bien un instrumento, si
cuando está en un ensayo adopta una postura incorrecta (“mal sentado”) o coloca
mala cara. Para poder ser artista se tiene que ocultar por completo los padeseres.
Un ejemplo claro, en el caso de un músico, sería siempre tocar con el alma en
cada ensayo sin importar que otros problemas le persigan, tener claro que
posición se debe mantener física y socialmente frente a la actividad que implica su arte: El artista se debe a su público, pues ser artista es un reconocimiento social.
✓ Sobre la actitud del artista como fenómeno colectivo.
Una actitud positiva implica entender y aceptar lo que ya es, pero sin convertirse
en efecto de las circunstancias o de otras personas sobre la percepción que se
tiene sobre uno mismo. El sentir de quienes valientemente se dedican al arte es
subvalorado, en un mundo donde impera un sistema socioeconómico que otorga
una excesiva valoración al desarrollo tecnológico, científico técnico y de las
ciencias exactas, reduciendo el valor humano y social en la capacidad de
producir, y no en mira al bienestar común como pilar natural de la economía como
ciencia, sino en busca de beneficios o utilidades (dinero) al costo humano y
planetario si es necesario. Es así, que las artes no se pueden ubicar en lo que va
del actual siglo XXI como un “periodo de oro de las artes”; aún cuando fueron en
ellas donde grandes movimientos de otras ciencias encontraron su influencia para
dar a luz a sus ideas, son ellas las que todo mundo busca para el llamado
“entretenimiento”.
Los artistas en el mundano inconsciente colectivo actual son percibidos como
personas no tan valoradas de forma inmediata frente a otras profesiones derivadas
de las ciencias exactas, puras o científico técnicas: el decir que se estudia Artes
frente a quien estudia Ingeniería Mecánica, por ejemplo, da la sensación de mayor
seguridad sobre la estimación social (y económica) de quien se dedica a la
segundo que a lo primero. Eso afecta la actitud de quienes son artistas a tiempo
completo frente a la imagen que tienen sobre sí mismos, su autoestima, frustración
y menosprecio de su ocupación frente a otras profesiones, vejando en el vital
papel que juegan las artes en el desarrollo humano y social y, por ende, en todas
las áreas. Dentro de la experiencia colectiva en lo que respecta a la frustración del artista, se
encuentra el despotismo del entorno donde se ejerce el arte, la ignorancia cultural
en la formación de las artes, la incitación a la irresponsabilidad, banalización y
antivalores de los medios de comunicación en pro de la idiotización, ignorancia y ...
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