trabajo

Práctica nº 5. Seminario. La figura de Nietzsche (Ejercicio en grupo: cada grupo tiene asignada una obra que corresponde a una etapa de la vida del filósofo).

antes de la sesión: el grupo de alumnos ha de reunirse para documentarse sobre la correspondiente etapa de la vida de Nietzsche, reconstruir la trayectoria vital e intelectual de esos años, explicar el argumento de la obra y susrepercusiones, así como detallar las circunstancias biográficas de su composición. Así mismo, se han de buscar algunos fragmentos representativos de esas obras que sirvan para ilustrar la exposición.
Bibliografía y enlaces:
-R. Safranski, Nietzsche. Biografía de su pensamiento, Tusquets, Madrid, 2001.
-C. P. Janz, Biografía de Nietzsche, Alianza, Madrid, 4 vols., 1983.
-F. Savater, Idea deNietzsche, Ariel, Barcelona, 1995.
-http://www.nietzscheana.com.ar
-www.estudiosnietzsche.org
El punto de partida común para recomponer la figura de Nietzsche es el texto de Ecce homo. Cómo se llega a ser lo que se es (autobiografía escrita en 1888).
en la sesión: cada grupo expondrá su trabajo partiendo del análisis del fragmento de Ecce homo y detallando el análisis de lacorrespondiente obra y circunstancias biográficas. El tiempo máximo de la exposición será de 5-8 minutos (es obligatoria la participación de todos los miembros del grupo y se recomienda el uso de power point).
tras la exposición: cada grupo entregará por escrito una memoria del trabajo realizado (extensión máxima: 2 folios)

Grupo 1: El nacimiento de la tragedia
Grupo 2: Sobre verdad y mentira ensentido extramoral
Grupo 3: Consideraciones intempestivas
Grupo 4: Humano, demasiado humano
Grupo 5: Aurora y La Gaya ciencia (La ciencia jovial)
Grupo 6: Así habló Zaratustra
Grupo 7: Más allá del bien y del mal
Grupo 8: La genealogía de la moral
Grupo 9: El Anticristo
Grupo 10: El crepúsculo de los ídolos


Ecce homo, “Prólogo”:
1
Como preveo que dentro de poco tendré quedirigirme a la humanidad presentándole la más grave exigencia que jamás se le ha hecho, me parece indispensable decir quién soy yo. En el fondo sería lícito saberlo ya: pues no he dejado de "dar testimonio" de mí. Mas la desproporción entre la grandeza de mi tarea y la pequeñez de mis contemporáneos se ha puesto de manifiesto en el hecho de que ni me han oído ni tampoco me han visto siquiera. Yo vivo demi propio crédito; ¿acaso es un mero prejuicio que yo vivo? Me basta hablar con cualquier "persona culta" de las que en verano vienen a la Alta Engadina para convencerme de que yo no vivo. En estas circunstancias existe un deber contra el cual se rebelan en el fondo mis hábitos y aún más el orgullo de mis instintos, a saber, el deber de decir: ¡Escuchadme, pues yo soy tal y tal. ¡Sobre todo, nome confundáis con otros!
2
Por ejemplo, yo no soy en modo alguno un espantajo, un monstruo de moral; yo soy incluso una naturaleza antitética de esa especie de hombres venerada hasta ahora como virtuosa. Dicho entre nosotros, a mí me parece que justo esto forma parte de mi orgullo. Yo soy un discípulo del filósofo Dioniso, preferiría ser un sátiro antes que un santo. Pero léase este escrito. Talvez haya conseguido expresar esa antítesis de un modo jovial y afable, tal vez no tenga este escrito otro sentido que ése. La última cosa que yo pretendería sería "mejorar" a la humanidad. Yo no establezco ídolos nuevos, los viejos van a aprender lo que significa tener pies de barro. Derribar ídolos ("ídolos" es mi palabra para decir "ideales"), eso sí forma ya parte de mi oficio. A la realidad sela ha despojado de su valor, de su sentido, de su veracidad en la medida en que se ha fingido mentirosamente un mundo ideal. El "mundo verdadero" y el "mundo aparente"; dicho con claridad: el mundo fingido y la realidad. Hasta ahora la mentira del ideal ha constituido la maldición contra la realidad, la humanidad misma ha sido engañada y falseada por tal mentira hasta en sus instintos más...