Trafico

“ILEGALES”

Aun recuerdo el tronido de la pólvora expulsando las ojivas de bala que espantaban a la gente aquel domingo en la plaza del pueblo.

Eran las diez de la mañana, del ultimo domingo de Agosto del año dos mil nueve, después de obsequiar una bendición a sus feligreses, el cura del pueblo despedía a los creyentes a sus hogares, podían ir en paz pues la celebración eucarísticahabía terminado; Paz?, en esos momentos esa palabra esta muy lejos de ser cierta, mucho mas lejos aun, de lo que estaba d ellos el dios que acababan de adorar unos momentos antes.

La gente se amontono al salir de la iglesia y como era costumbre los domingos había un pequeño mercadito ambulante, donde gente de otros lugares llegaba a comercializar sus productos; los pobladores localesacostumbraban surtir sus despensas al salir de misa, o bien disfrutaban de un desayuno típico en compañía de la familia, ya fuese de un buen plato con mole de panza, o una barbacoa recién salida del hoyo, o la típicas carnitas de cerdo; platillos que aunque típicos no eran regionales, pues me gustaría señalar, que la barbacoa es regional del estado de Hidalgo, las carnitas de Michoacán, y el mole de panza,no recuerdo exactamente pero el platillo que si es muy regional es el famoso mole poblano, que curiosamente no se acostumbra vender como antojito típico en los mercaditos locales;”dato curioso”. Pero hoy no fue igual; el sonar de tres estallidos hicieron correr a la gente en todas direcciones chocando entre si, la gente de los puestos permanecía inédita, buscando de donde venia ese sonido volteabanhacia todos lados, fue entonces cuando el vendedor de pollo, como si estuviese viendo una película de esas de narcos mexicanos, se percato de lo que estaba pasando, sin saber o ni siquiera imaginar, que el destino en esa escena de la vida lo iba a involucrar.

Un pueblo desierto, dos hombres en el centro de la plaza, bien parecía una película del viejo oeste solo que aquí no era un duelo loque ambos tenían planeado; el sicario pensaba en cumplir con su misión y el otro, el otro ni siquiera sabia que pasaba, no esperaba nada ni sabia como actuar, muy a pesar de estar armado no estaba entrenado para reaccionar en situaciones de combate, así que el miedo paralizo su cerebro solo reacciono hasta el momento en que el sicario lanzo, en un grito firme y decidido, la sentencia que estabapor ejecutarse; A ti te estaba buscando, te pasaste de madres con mi patrón y ahora vas a pagar, señalo. Y en ese momento, cual conejo que huye a su guarida tratando de resguardarse del peligro, el oso; hacia era conocido el sentenciado, trato de huir para ponerse a salvo, y creyendo tomar por sorpresa al jinete del apocalipsis, emprendió la huida metiéndose entre los puestecitos del mercado,tratando de evadir cualquier ataque, pero no alcanzo a dar la tercera zancada cuando el primer proyectil alcanzo su extremidad inferior izquierda, en términos coloquiales y sin tanta pomposidad, la pierna derecha, aun así, herido, trato de seguir avanzando, y tropezando con lo que encontraba a su paso caminaba titubeante en dirección del hombre que petrificado por los sucesos no sabia lo que estaba apunto de suceder, si, el vendedor de pollo.

El sicario no dudo en seguir a su victima, apresuro el paso y sin perderlo de vista, en cuestión de un suspiro lo alcanzo. El oso en su temor, cobarde e inútilmente trato de refugiarse entre los puestos, al llegar al de la venta de pollo rápidamente advirtió que la ventanilla de la camioneta estaba abierta y en un brinco algo torpe logrointroducirse creyendo falsamente que ahí estaría a salvo, Fanny, una niña de diez años, dormía muy tranquila en el interior de la camioneta, ella desconocía lo que ocurría a su alrededor, para ella, la hija de los vendedores de pollo era un día como los demás en el que acompañaba a sus padres por la mañana y por la tarde regresaría jugar con sus amiguitos, por la noche cenaría una taza de leche con un...