Transporte no motorizado en bucaramanga
J. VILLABONA ORTIZ*
Resumen
Los procesos de expansión urbana a través del nuevo sistema de transporte integrado han asumido un rol funcional en el crecimiento de la ciudad de Bucaramanga, obligando a las entidades del Estado a una transformación institucional, política y operativa que les permitan atender las solicitudes orequerimientos de las necesidades viales y de transporte de las comunidades, relacionadas con la movilidad, especialmente el transporte no motorizado.
Los actores no motorizados, sean peatones, ciclistas y discapacitados, son las personas que más se les vulneran sus derechos en la movilidad urbana y disfrute del espacio público. Muy notorio en las ciudades Andinas y de Centroamérica, pues en términosde legislación, infraestructura, gestión, educación y protección, sus condiciones de seguridad vial son limitadas a gran parte de la población urbana, la cual se moviliza frecuentemente de forma no motorizada, quienes son fácilmente víctimas en accidentes de tránsito (peatones y ciclistas)1. De esta manera se está vulnerando uno de los derechos fundamentales, el derecho a la vida.
La movilidadno motorizada y uso del espacio público están relacionados con el derecho a la vida, la protección del medio ambiente y salud pública, la sociabilidad y la sostenibilidad urbana, entre otros.
La legislación vial con respecto a los actores de la movilidad no motorizada, es considerada por los peatones como acciones impositivas o restrictivas que van en contra de la libre locomoción, más no comomedidas preventivas y de seguridad vial.
Palabras clave: transporte motorizado y no motorizado, espacio público, movilidad, expansión urbana, legislación vial.
1. Introducción
La infraestructura vial peatonal en Bucaramanga, es insuficiente, segmentada y dispersa, por lo general, se encuentra en mal estado, frecuentemente invadida por vendedores ambulantes con vehículos detracción humana (zorras) y/o vehículos motorizados (automóviles y motocicletas) entre otros. Y cuando se trata de recuperar estas áreas públicas, la situación se hace muy compleja, debido a compromisos políticos que les han permitido utilizarlo “transitoriamente” por las administraciones municipales de turno. Esta situación también dificulta los programas de educación y cultura ciudadana; las estrategiaspara reducir la accidentalidad vial como de aquellos operativos especiales para mejoramiento del espacio público etc., implementados por los organismos de transito.
Sin embargo, es de reconocer que los peatones y ciclistas se les presentan grandes conflictos para transitar y/o realizar travesías en muchas calles o avenidas. Las condiciones de vulnerabilidad y riesgo de estos usuarios delespacio público son muy altas, especialmente en intersecciones y/o con tramos de las vías peatonales donde se impone el subsistema motorizado (motos y automóviles) en detrimento del sistema no motorizado.
La falta de generar estrategias interinstitucionales, se reflejan por el resultado de acciones incompletas e independientes que afectan la interacción entre los subsistemas viales y detransporte. El estado actual de la malla peatonal, evidencia que las acciones se centraron en intervenir los espacios peatonales y las posibles ciclovías, como entidades aisladas (aceras, alamedas, parques, plazas, etc.) y no como elementos continuos dentro de un subsistema. Por lo anterior, esa la búsqueda de iteración con el subsistema motorizado es insuficiente (cebras, cruces, pasos, sendas, puentes,semaforización, señalización, etc.).
Para generar un verdadero equilibrio entre los dos subsistemas, es necesario generar su articulación y continuidad, y para ello es preciso intervenir principalmente el subsistema motorizado, ante todo las motocicletas y automóviles particulares. Esto quiere decir, que aparte restringir y limitar el transito mediante la medida de el pico y placa, se debe...
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