tres meditaciones
A José Manuel Rivas Sacconi.
A Jesús Estrada Monsalve
y Gilberto Ballesteros Rueda.
A Lucio Antonio Pabón Gaitán
e Iván Mauricio Poorán Pabón.
I. ¿UN HOMBRE DEL RENACIMIENTO?
Mi primer encuentro con fray Luis data de los años de
adolescencia, cuando en una revista de mi tierra leí La profecía del Tajo, comentada por el ilustrado jesuíta J.Llobera.
En los días del bachillerato volví al hontanar leonino por
medio de Las cien mejores poesías de la lengua castellana, de
Menéndez y Pelayo; y en los universitarios — en la compañía
de amigos inolvidables, de noble versación en letras clásicas,
como Guillermo Hernández Peñalosa y Ramón Francisco Sánchez Figueroa — por medio del Cantar de los cantares, La perfecta casada, De los nombresde Cristo y de las poesías restantes.
Mucho más tarde me acerqué a La exposición del Libro de Job
y demás páginas del gloriosísimo maestro. Todo esto se hizo
sin método, por simple afición, tomando notas aquí y allá, que
hoy al tratar, de desentrañar la oda A Salinas con destino a mi
hijo, estudiante de literatura, han revivido no sin un explicable
desorden; y, tras refrescar lecturas y haceralgunas confrontaciones, han venido a parar en estas que he llamado 'meditaciones' por darles algún nombre. "Lo cual, según comentó en
cierta ocasión fray Luis, no digo que he hecho yo, ni soy
tan arrogante, mas helo pretendido hacer, y así lo confieso".
THESAURUS. Tomo XX. Núm. 2 (1965). Lucio PABÓN NÚÑEZ. Tres meditaciones sobre ...
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LUCIO PABÓN NÚÑEZ
BICC, XX, 1965
IMAGENDE FRAY LUIS
Veamos, lector, en un contemporáneo del agustino una
vivaz descripción evocadora de la estampa con que suelen ornarse las ediciones frailuisianas: "En lo natural, fue pequeño
de cuerpo, en debida proporción; cabeza grande, bien formada,
poblada de pelo algo crespo, y el cerquillo cerrado. La frente,
espaciosa; el rostro más redondo que aguileno, como lo muestra el retrato;trigueño el color, los ojos verdes y vivos. En
lo moral, con especial don de silencio; el hombre más callado
que se ha conocido, si bien de singular agudeza en sus dichos;
con extremo abstinente y templado en la comida y bebida
y sueño; de mucho secreto, verdad y fidelidad; puntual en la
palabra y promesas; compuesto, poco o nada risueño. Leíase
en la gravedad de su rostro el peso de la noblezade su alma;
resplandecía en medio de esto por. excelencia una humildad
profunda. Fue limpísimo; muy honesto y recogido, gran religioso y observante de sus leyes. Amaba a la Santísima Virgen
ternísimamente; ayunaba las vísperas de sus fiestas, comiendo
a las tres, y no haciendo colación..." \
HITOS BIOGRÁFICOS
Con este trozo del poeta y pintor Francisco Pacheco, suegro de Velázquez, vemosque la ya recordada efigie de León
corresponde a una buena mano, guiada por no despreciable
poder de penetración síquica. Para mejor entendimiento de
cuanto haya que seguir diciendo, conviene fijar desde ahora
unas fechas y unos acaeceres de relieve en la vida de fray Luis.
Valga desde ya la observación de que, a pesar de muy excelentes estudios biográficos, como el de Bell 2, todavía hayzonas oscuras en este campo. Lástima grande que el inquieto
y agudo Luis Astrana Marín no hubiera llevado a término
la biografía que preparaba, para la cual había acopiado un
1
FRANCISCO PACHECO, Libro de descripción de verdaderos retratos de ilustres
y memorables varones, Sevilla, 1599.
1
AUBREY G. F. BELL, Luis de León: Un estudio del Renacimiento español,
Barcelona, Casa Edit. Araluce, [s.£.]•
THESAURUS. Tomo XX. Núm. 2 (1965). Lucio PABÓN NÚÑEZ. Tres meditaciones sobre ...
BICC.XX, 1965
SOBRE FRAY LUIS DE LEÓN
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material abundante y novedoso, según le oí decir en Madrid
meses antes de morir.
Contra la fecha dada por Pacheco (1528), Bell opina que
su biografiado nació en 1527, en la manchega villa de Belmonte. La de la muerte (1591) no tiene discusión. Así...
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