TU Y YO SOMOS TRES







Tú y yo somos tres

Comedia psicológica en dos actos de
Enrique Jardiel Poncela






































Personajes
Dominga, criada de Manolina
Martínez González, periodista
Úrsula, tía de Manolina
Pajares, bombero
Gumersindo, portero de la casa
Rebollo, cabo bombero
Matilde, prima de Manolina
Raimundo, tío de ManolinaManolina, enamorada de Rodolfo
Alberto, novio de Matilde
Rodolfo, enamorado de Manolina
Adolfo, hermano de Rodolfo
Lóriga, médico cirujano


Decoración: Una salita puesta con un tierno buen gusto y un escrupuloso cuidado, uno se da cuenta de que pertenece a una casa arreglada por manos femeninas con destino a unos recién casados. Tres salidas: una, en el foro izquierda otra, en el foroderecha y foro centro, y la última, en la lateral izquierda. La del foro izquierda se abre a una alcoba y la del foro centro y derecha, da acceso al recibimiento, con la puerta de la escalera frente al espectador. En el lateral derecha, ventanal muy amplio. Todo el moblaje es doble: un diván y un sillón en la derecha; un diván y un sillón, en la izquierda; una mesita delante del diván de laizquierda y otra mesita delante del diván de la derecha, y cada cosa exacta e idéntica ala de enfrente, con una sola diferencia: que al lado del diván de la izquierda hay un costurero, y al lado del diván de la derecha hay un estantito fumador. Repartidas estratégicamente por la escena, siete fotografías de diversos tamaños, pero todas sacadas de la a misma copia, que representan a Rodolfo, un individuode unos treinta y cinco años, no mal parecido, al que en ninguna de las fotos se le ve el brazo izquierdo. La séptima fotografía, que es la más grande, se halla en la pared de la izquierda. Dos teléfonos, uno en cada una de las mesitas y eso es todo.










Primer acto

(Al levantarse el telón, el ventanal y la puerta de la escalera abierta de par en par. En escena, Dominga,cocinera; joven y bien uniformada)

DOMINGA.- (Que está mirando por el ventanal, y aterrada) ¡Ay, dios mío! ¡Yo no puedo verlo! ¡Yo no puedo verlo! (Separándose del ventanal) ¡Dios mío de mi vida! ¡Dios mío de mi corazón!
(Por la puerta de la escalera surge corriendo Martínez González, un joven bien vestido, de buena facha)
MARTÍNEZ.- ¡Hola, buenas! ¿Es aquí, verdad? (Asomándose al ventanal) Sí;aquí es. ¡Que burrada! ¡Que estas cosas puedan ocurrir! Soy periodista. Martínez González de “El Noticiero”. Un tipo con suerte, porque siempre llego a tiempo para conseguir las grandes catástrofes. Ahora que la fecha del día de hoy voy a hacer que me la borden en el pijama. Para empezar, me llaman por teléfono a primera hora, surge una reunión y, ¡Cataplum!, me entero de un vuelvo de automóvilacaecido en una carretera, que cómo habrá sido la cosa, que las corbatas de los dos señores que iban sentados delante, se las han encontrados puestas a los dos señores que iban sentados detrás. Me visto en un vuelo, salgo de la casa y ¡Pumba!, me encuentro con el incendio de los “Almacenes Gil Blas, lo más barato aquí encontraras”, ¡que siniestro! Nueve casas ardiendo, dos cuadras asadas, y todoslos bomberos de la ciudad reunidos allí y resueltos a que no ardan más casas; lo cual yo creo que lo van a conseguir, porque ya han tirado al suelo todas las casas que quedaban en la calle. A continuación tomo un taxi, salgo apresurado para el periódico, y ¡Zas!, me sumerjo en mitad de este drama de aquí, que es lo más bonito que he encontrado en toda mi vida periodística.
DOMINGA.- ¿Eh?MARTÍNEZ.- Esa señorita que está ahí afuera, en la fachada, es la dueña de la casa ¿ no? Y usted es de la servidumbre, ¿verdad? ¡Colosal! ¡Pues, vamos, noticias! (Saca del bolsillo unas hojas y una pluma)
DOMINGA.- ¿Eh? Pero...
MARTÍNEZ.- ¿Cómo ocurrió la cosa? ¿A qué lo atribuyen? ¿Ha sido accidente o determinación personal? ¿Ustedes qué creen? : ¿que se mata o que la salvan?
(Por el foro centro,...