Ultimas tardes con teresa
Una reflexión socio-económica sobre la Cataluña de los años 50
Mucho ha llovido desde el verano de 1956, momento en el que Juan Marsé da comienzo a la trama de la novela. La España actual es sustancialmente distinta de la España de los primeros años cincuenta, aunque algunas reminiscencias perduren hasta ahora, como por ejemplo el uso común de la palabra xarnego,para designar al que no habla catalán, en las calles de la Barcelona actual. ¿Cuál era, a grandes rasgos, la situación socio-política de Cataluña en los años 50 del siglo pasado? 1956 y 1957 fueros años de gran conflicto político y social, con sonadas protestas estudiantiles que dieron luz a una reorganización de la oposición interna al régimen. La situación económica también era mala, con unaaltísima inflación y una corrupción habitual entre los cuadros gobernantes. Aunque en el ámbito internacional el régimen franquista estaba empezando a ser tolerado y las ayudas norteamericanas sirvieron para aliviar un poco la situación económica, la economía española necesitaba reformas en profundidad. De esta forma, las protestas universitarias se sumaron por primera vez al movimiento obrero y susreivindicaciones (huelgas generales en el País Vasco, por ejemplo), generando un cuadro general de gran tensión en el conjunto del país.
Es en este contexto, aunque trasladado al ámbito local de la Barcelona urbana, en el que transcurre “Ultimas tardes con Teresa”. De forma general, lo que más me llama la atención en esta novela es el gran contraste socio-económico que presenta entre la burguesíaadinerada, representada por Teresa Serrat, y la clase trabajadora, en la cual incluiríamos a Manolo Reyes, aunque él mismo no sea un gran trabajador precisamente. En este caso, la diferencia social tiene un claro componente identitario-migratorio. En la parte alta de la pirámide se instala la burguesía catalana, la que permaneció en el país después de la guerra, enriqueciéndose rápidamente bajo elparaguas del régimen. Esta burguesía es de origen y apellido catalán, y catalanoparlante. Es retratada por Marsé habitando torres (chalets) en la parte alta de Barcelona (San Gervasi), con segunda residencia en la playa, con formación universitaria, conduciendo coches deportivos (incluso las mujeres) y organizando fiestas en sus jardines privados a la vera de la piscina.
En contraste con esteritmo de vida, los inmigrantes andaluces se muestran muy distintos, una distinción que comienza con el físico (son mucho más morenos) y con el propio acento. Es un colectivo inmigrante de baja cualificación (los murcianos, uso genérico para denominar a la clase baja), que forma parte de las oleadas migratorias que recibió Cataluña a partir de 1941 debido a su industrialización, sobre todo en elárea textil y en la producción de bienes de consumo como el menaje del hogar. Debido al desarrollo económico, durante los años 50 y 60 Cataluña experimentó un notable crecimiento demográfico. A raíz de esto se creó una mezcla de identidades entre los catalanes de origen y los recién llegados, llamados despectivamente xarnegos, generando importantes diferencias tanto identitarias-nacionales como declase. Manolo por ejemplo es consciente de su pertenencia a la clase obrera pero reniega de ello. No tiene conciencia de clase ni quiere involucrarse en ningún tipo de reivindicación colectiva, sino que se comporta a menudo del mismo modo que lo haría un “señorito” burgués, mostrando los mismos prejuicios, el desprecio y el mismo comportamiento condescendiente para con todos aquellos que no formanparte de aquella clase hacia la cual él aspira a ascender.
Las dos clases sociales son verdaderos mundos aparte, lo cual se traduce en una perfecta segregación urbana. San Gervasi y El Carmel están muy cerca físicamente, pero la distancia socio-económica que las separa es abismal. En la barriada de El Carmel las calles están sin asfaltar y las casas pequeñas se apilan unas sobre otras de...
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