¿Un amor.. correspondido?
El joven de cabellos rubios se encontraba más pensativo de lo normal.
Hacían ya dos noches desde que eldios pelinegro le había confiado su mayor secreto; estaba enamorado del shinki pelirrojo de Bishamon y estaba a punto de declararse.
*Hace dos noches*
―Yukine, creo que ya estoy listo.―dijo con entusiasmo el dios―¿Podemos ensayar una vez más?―
El rubio solo soltó un suspiro de pesadez, se hizo silencio por algunos instantes para luego ser cortado en seco por eljoven shinki.
―Si esto es realmente importante para ti...está bien―contestó con un leve sonrojo al sentir la mano del peli negro acariciar su cabello.
―Muchas gracias, Yukine.―respondió el pelinegro con una sonrisa entusiasta para luego tomar aire y al fin hablar.―Bueno...yo... -se aclaró la garganta.―desde hace tiempo he sentido esto y me gustaría poder decirte loque siento por ti, yo te amo...―
El rubio se encontraba perdido en sus propios pensamientos, esperando que aquellos labios pronunciaran "Yukine" al final de la oración, sin embargo susilusiones se cortaron cuando un ensordecedor "Kazuma" se escuchó.
―¿Y bien? ¿Cómo lo hice?―
No hubo contestación por parte del menor, tenía un nudo en la garganta y casi seescapaban algunas lágrimas, pero volteó a ver al dios esbozando una falsa sonrisa.
―B-bien...has mejorado.―
―Me alegra oír eso.―solo se limitó a sonreír.
El rubio estaba enamorado de sudios, sin embargo solo sería su shinki, nada más.
El mayor se retiró a hablar con Kofuku, entonces las lágrimas cristalizaron sus ojos.
Alzó la mirada y ahí estaba el pelirrojo, era muyapuesto, era obvio que él no era ningún rival para el chico de gafas, suspiró...al fin había entendido por que Yato se había enamorado, ¿Y su corazón?....estaba roto....doblemente.
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