Un mundo perfecto (cuento)
Aquella mañana de abril parecía normal y tranquila, nada salía de su orden cotidiano, las mismas personas transitaban por las mismas calles y los mismos autos ensordecían con losmismos sonidos estridentes los rincones de aquella pequeña ciudad perdida en el mapa, solo conocida por aventureros exploradores y por náufragos desorientados, pero donde los más grandes inventos dela humanidad habían logrado su máxima perfección, y es que no por nada allí residían las mentes más brillantes del mundo, hombres y mujeres que por una fatalidad ciega inentendible llegaron al mismolugar, en una misma época y con un mismo sueño: hacer del mundo un lugar perfecto. No los aburriré contándoles cómo fue aquel hecho fantástico que situó a esta ciudad en el mapa ni como aconteció esamagnífica fatalidad que la pobló con esta gente tan brillante, solo les contaré cómo aquella mañana de abril se convirtió en la más entrañablemente querida y hasta hoy recordada de las mañanas de“Dóminus terrae” la ciudad de los genios, en donde nadie gobernaba ni era gobernado, incrustada en al medio de la cordillera de los Andes, ni de Chile ni de Argentina, la única ciudad soberana entre dosnaciones. El reloj ya marcaba las 7 am cuando al unisonó los gallos eléctricos comenzaron a sonar en los tejados de las 100 casa que habían en esta ciudad, 100 televisores se prendieron, 100 autos sehicieron funcionar, 100 niños se lavaron los dientes y 100 madres se pusieron a cantar…todo funcionaba perfecto y con la más exacta proporcionalidad, y es que para cada uno de los habitantes de estaextraña ciudad nada valía más que la perfecta funcionalidad, pero cuando todo parecía ir bien, un extraño olor turbo la rutina de todos, aquel hedor nauseabundo parecía provenir de la perfecta fuentede agua ubicada en el centro de la perfecta plaza de la cuidad, nadie podía creer que sus avanzados sistemas de purificación de aire no hubiesen podido controlar dicho olor ni menos les parecía...
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