Un mundo posmoderno, ensayo de "el país de las últimas cosas" de paul auster

Una ciudad posmoderna

Diego Mauro Pojmaevich, 7º CN1

Muchas veces nos preguntamos hasta donde llegará este mundo, como terminará o si estaremos para cuando esto ocurra, sin tomar en cuenta el porqué del hecho. Simplemente lo ignoramos, lo dejamos de lado, como si fuera un detalle insignificante, y sólo tomamos al hecho en sí como lo fundamental. Lamentablemente vivimos en una constanteinconsciencia; lo único que nos importa no llega mas allá de nuestro ombligo. Nos enceguecemos tan fácilmente que no logramos ver el mundo que nos rodea, o mejor dicho no queremos ver ese entorno que poco a poco va degradándose. Nos sentimos tan avergonzados de nosotros mismos que no tenemos la voluntad de levantar la vista sólo un poco para ver lo que provocamos. Somos como un niño pequeño, el cualteme a su madre y trata de ocultarle lo malo que ha hecho, pero lo que no sabemos es que ella ya se enteró. Es entonces cuando debemos preguntarnos otra vez ¿Por qué hacemos lo que hacemos? ¿Por qué si sabemos que algo está mal, lo hacemos del mismo modo?.
Así es cómo el mundo sucumbe frente a las acciones de los hombres de toda la humanidad, esos actos inconscientes que sólo persiguen finesegoístas y mezquinos. Fines claramente reconocibles en hechos tan elementales como la supervivencia, pero ya no la supervivencia de la sociedad, ni del mundo o la humanidad, sino la de uno mismo. Tal es el egoísmo al cual el hombre puede llegar en estas circunstancias, que deja de importarle las personas que lo rodean, ya que a la hora de seguir de pie, sólo se preocupa por sí mismo.
Austerplasma estas ideas en muchos de sus libros, pero le da un énfasis particular en “El país de las últimas cosas”. Este deseo de sobrevivir, en ese lugar hostil, carente de prácticamente todo, hasta de la esperanza misma. Un espacio en el cual nada perdura, una ciudad, al parecer, desmoronada por la acción del hombre moderno, que no previó o no quiso ver lo que iba a terminar produciendo. Un país en elque un día ves una cosa y al momento desaparece sin dejar rastro alguno, o como bien dice Anna, la protagonista, “Cierras los ojos un momento, o te das la vuelta para mirar otra cosa y aquella que tenias delante desaparece de repente” (Pág. 11).
Por otro lado, pareciera ser que lo único importante es seguir de pie, no importa como ni hasta cuando, ya que el simple hecho de no hacerloacarrearía la muerte segura. Esa muerte “súbita” que representa una de dos opciones para la gente que habita esta ciudad, ya que como nos plantea el personaje principal, no hay otro remedio mas que tratar de sobrevivir dando un paso por vez o dejarse morir y pudrirse.
Hay que tener en cuenta que nosotros vivimos en el mundo de la Modernidad, de la producción en masa, la industrialización, caracterizadopor el progreso a nivel global, tanto en materia económica como también social y política. Nos enmarcamos en un contexto capitalista y con una economía de producción, con una fuerte valorización de los recursos naturales que poseemos y una acérrima defensa del medio ambiente. En cambio, en la novela nos enfrentamos a una sociedad posmoderna, que renuncia al progreso; la cual está inmersa y hastapodríamos decir, obsesionada con el consumo de manera compulsiva, cambiando esta idea de producción que se tiene en el mundo actual, y generando el paso de una economía de producción a una de consumo masivo. También se evidencia que ni el pasado ni el futuro importan en este punto, ya que pierden valor frente al presente, producto, entre otras cosas, de la búsqueda de lo inmediato por parte delhombre. Desaparece el idealismo, no sólo por el desinterés por el futuro, sino también porque se renuncia a las utopías y a las ideas de progreso.
Esta ciudad futurista, la cual se podría ver como una consecuencia no tan lejana del hoy mismo. Un mañana inminente si no se toma conciencia ni medidas respecto de nuestras acciones. Tranquilamente podríamos distinguir a este país descrito por Auster,...