un prisionero más

Un prisionero más

Interminable. Mi mano siente lo áspero, las grietas, los recovecos que no tienen fin. Esa oscuridad eterna que todo lo envuelve, que todo lo sabe, que observaacechante, que – porque no decirlo – que me estruja el alma.
El aire asfixiante se filtra por mis poros. La humedad me corrompe. La soledad máxima que me enfrenta a mi conciencia. A mí. A mí mismo.No hago más que sentir los entregados latidos de los restos de mi corazón. Mi respiración cada día más esforzada, mis pulmones contaminados de suciedad. Pero no, imposible. Ya no me quedanfuerzas. Acumulo resentimiento pero solo es eso. La acción no existe.
Esa masa oscura triunfo. Ese silencio indescriptible, agobiante, que me aturde y tortura. Mi mano siente lo áspero, lasgrietas, los recovecos que no tienen fin.
Ya no, ya no siento mi cuerpo, mis dedos me auxilian en esta confusión de sentidos. Ya soy parte de ella, lo lograron, ya pertenezco a la muerte,a la cárcel fría e impersonal, a sus leyes. Un prisionero más.

Daniela Barcia

JOAQUIN

Inocencia.
Un beso, un abrazo, una lágrima.
Su expresión lo deja adivinar todo,
él no seesconde nada para si.

Mitad señor, mitad chiquito,
gran inteligencia, enorme corazón!
Me mira de reojo despacito
tratando de captar mi atención.

Joaco, mi querido gordito.
Vos meenseñaste sobre este otro mundo,
el de los seres bajitos.

Me entregaste tu inmenso cariño.
¿Te acordás cuanto te costó mi amor?
Primero una mano en el hombro,
luego una sonrisa deniño,
entre franqueza y temor.

Fue muy fácil dejarme querer.
Fue muy simple ocupar mi lugar,
recibir todo tu amor sin siquiera dudar.


Me vas a extrañar, eso lo sé.
Aunque a los seisaños el tiempo se piensa de otra manera.
Pero Joaco, mi querido gordito,
por favor decime que hago yo con tu amor,
me niego a que se convierta solo en dolor.

Daniela Barcia