un secreto

Crítica al libro El Chile Perplejo.
Del avanzar sin transar al transar sin parar
De Alfredo Jocelyn-Holt

Patricio Navia
Department of Politics
New York University
Pdn200@is7.nyu.edu
11 de febrero de 1999

La portada representa un poco lo que es el libro. El Chile Perplejo está reflejado en la mirada profunda,
pero sorprendida y temerosa, de un hombre que mira directamente a la cámaradel fotógrafo. El peinado
y la ropa podrían señalar que se trata de la década de los 70. Pero no hay certeza. Y en ninguna parte se
señala de dónde salió la foto.
El hombre que Jocelyn-Holt rescata para la inmortalidad de las bibliotecas es, según tengo entendido, un
detenido-desaparecido. La foto habría sido tomada en el Estadio Nacional poco después del 11 de
septiembre de 1973. JocelynHolt, en una omisión accidental que sin duda nos representa a muchos, ha
dejado escapar el detalle. Hablamos de Chile y su historia sin acordarnos mucho de sus víctimas
comunes.
El libro es de elite y es para la elite. En ningún momento pretende algo diferente. En cierta medida la
imagen de la portada lo dice todo. El hombre común (aquí especulo mucho, sin citas concretas que
corroboren lo quedigo, sin notas al pie de página, en fin, cometo el mismo pecado que Jocelyn-Holt –
este no es un paper académico, el suyo tampoco) nos mira perplejo minutos antes de entrar a la lista de
detenidos desaparecidos. El no entiende, nosotros tampoco. El va al patíbulo, sin juicio, pero con
castigo. Nosotros, en cambio, miramos desde fuera del libro, fuera de la foto, fuera del estadio (nosotrosleemos las listas de los detenidos desaparecidos), reflexionamos con Jocelyn-Holt y al final compartimos
su visión o discrepamos con el autor. Los otros desaparecen. La perplejidad de los dos grupos debe ser
explicada, la nuestra por no entender lo que pasó en Chile y la de ellos, por entender por qué les pasó lo
que les pasó.
Esos son los dos grandes problemas en el libro, el resto causa unaembriaguez intelectual, seduce de
comienzo a fin y no deja indiferente. La narrativa rica y fluida de Jocelyn-Holt (J-H), sus poderosas
analogías, sus agudos comentarios y la riqueza de su prosa alimentada siempre con versos de boleros,
tangos y hasta canciones en inglés, hace que las 320 páginas se lean de corrido.
El libro es para chilenos, sobre un tema profundamente chileno y para ser leídose requiere conocer
relativamente bien los detalles de la historia nacional desde Alessandri en adelante. Lo escribe un
chileno, pero no cualquier chileno. Es un chileno de elite, un artistócrata (sí es que los hubiera), un nieto
de Balmaceda (eso lo dice él mismo, para que nadie lo acuse de andar pretendiendo ser algo que no es),
un liberal, liberal de derecha, pero liberal. Además comete elpecado original de vivir muchos años fuera
de Chile y poder mirar y entender el país con esa saludable distancia que da el mirar de lejos, el sentirse
emocionalmente perteneciente también a un mundo diferente al que se estudia. Jocelyn-Holt intenta
mirar a Chile desde dentro –desde una elite interior-- y aunque pertenece al país, es también un afuerino.
Después de vivir tanto tiempo fuera,pretende hablarnos en términos que entendamos, mostrarnos a un

Chile desde la perspectiva de aquel que ha podido salir de la caverna y regresa para mostrarnos las
sombras y la luz.
Y cómo el libro es para chilenos, se le perdonan los errores como aquel de la página 92, cuando
equivocadamente dice de Cuba, "la que al cantar el gran Gautier / llamó la perla de los mares." La
referencia de lacanción es Puerto Rico, no Cuba, pero el libro es para ser leido en Chile, por chilenos, y
para convencer al lector de la propuesta de Jocely-Holt.
Y el historiador Jocelyn-Holt lo dice enseguida, su objectivo es "intentar persuadir acerca de las virtudes
de una postura política liberal moderada, que es lo que, a mi juicio, hace falta en este país" (p. 16). Y
desde esa perspectiva, Jocelyn-Holt...