Una frontera difícil de distinguir: la verdad y la historia

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Universidad Andrés Bello

Facultad de Humanidades y Educación

Departamento de Artes y Humanidades

Licenciatura en Historia

Seminario de Especializacion I

“Una frontera difícil de distinguir: la verdad y la historia”

Alumno:

Marlon Díaz Villegas

Profesor:

Verónica Undurraga S.

Ayudante:

Valentina Bravo.SANTIAGO DE CHILE

Abril, 2010

“Yo soy el camino, la verdad y la vida

nadie viene al padre si no es por mi” Jn.14:6

El concepto de verdad en la cotidianidad de la vida del ser humano es tan común que no se pone en duda su forma y veracidad, además de su imposición única por sobre el resto, dándole una autenticidad, esta verdad es única y nadie estar por sobre ella, es así como esta“verdad” se encuentra en todos los campos de la vida cotidiana del hombre sea en religión, política o cualquier otra actividad en la relación social del ser humano inclusive consigo mismo. Es de esta forma como a través de los años esta “verdad” en la historia del hombre ha sido una luz que lo ha llevado a la gloria imponiéndose por sobre la barbarie del otro.

Cuando el historiador quiereinvestigar una época y se ve en la obligación de reconstruir un contexto, proceso o un suceso para aclarar su trabajo se encuentra con esta verdad, pero el problema claro es que esta “verdad” no es única, es decir, es única para un individuo, para un grupo, pero no es de todos, difiere en muchos casos del otro e inclusive es percibida de diferente forma por todos los involucrados en esta, pero es su“verdad” y quien se puede imponer sobre esta, ejemplo de esto es quien se puede imponer ante un ferviente creyente de dios, es su verdad y moriría por ella, es así como el historiador se enfrenta al problema más importante la objetividad de la verdad.

El historiador en sus investigaciones usualmente ocupa fuentes que le permiten explicar a través de un método y extracción de información deeste documento su trabajo, es decir fundamentar sus teorías y validar su estudio.

En los trabajos de Michel Foucault, “Yo, Pierre Rivière, habiendo degollado a mi madre, mi hermana y mi hermano…” Un caso de parricidio del siglo XIX presentado por Michel Foucault, y el trabajo de Fernado Trazegnies, Ciriaco de Urtecho: Litigante por amor. Reflexiones sobre la polivalencia táctica delrazonamiento jurídico, exponen dos casos jurídicos de diferentes lugares y tipo de justicia.

El problema para el historiador en este sentido es que en el caso judicial, que es su fuente, es un enfrentamiento de verdades, que se cuestiona su veracidad, dado que esta verdad es reconstruida para un organismo judicial en donde se busca un objetivo ocupando cualquier medio para conseguir el falloa favor del juez, es así como estos razonamientos se enfrentan tratando de demostrar su validez enfrentándose estas verdades las cuales buscan validez es así como “La validez no está determinada por una inferencia lógica necesaria a partir de ciertos datos ciertos. Verdad y validez se distinguen en el hecho de que esta última se localiza en el campo de lo probable antes que de lo cierto, de lorazonable antes que de lo demostrable”[1] es de esta forma como el historiador se enfrenta a una documentación en la cual no importa el resultado del juicio en la mayoría de los casos, prohibiéndose este poder hacer un juicio o prejuicio de valores dado que no es permitido para este esta opción en un trabajo de investigación. Es de esta forma como el historiador debe entender que “el razonamientojudicial puede llegar a diferentes “verdades”, puede llegar a conclusiones distintas aunque perfectamente razonables”[2] por ende este documento tiene una validez judicial, pero puede tener una carencia de verdad moral esperada por la sociedad actual como de la época a través de esto no encontramos ante una “verdad especulativa: la sentencia del juez no será verdadera o falsa sino simplemente...