Una reflexi n sobre el legado filos fico de Augusto Comte

Una reflexión sobre el legado filosófico de Augusto Comte
David Rodríguez
Facultad de Filosofía y Letras, UANL.
Resumen:
El positivismo, movimiento filosófico surgido en el siglo XIX con Saint-Simon (1760-1825) y sistematizado conceptualmente por Auguste Comte (1798-1857), ha sido desdeñado a causa de su incomprensión y de algunos errores evidentes en que incurrieron estos filósofos alconsiderar que lo que era aplicable a un aspecto de la realidad lo era a todos por igual.
A mi parecer, la filosofía positiva representa un gran progreso en el pensamiento humano y en la actitud del ser humano ante la vida y la Naturaleza. Estos progresos tienen que ver con el rechazo de la superstición y la exigencia de explicaciones racionales a los fenómenos del mundo, además, por supuesto, de laconfianza en el poder transformador de la voluntad y el pensamiento humanos.

Ponencia:
A mi parecer, los errores que pueda contener la filosofía de Augusto Comte radican más en el contexto político y económico de su época y son el resultado más o menos predecible- de un optimismo propio de una época que estuvo empapada, por una parte, de una preocupación sincera por poner a disposición de lahumanidad entera los beneficios de la técnica; y por otra, de la esperanza -quizá infundada y precipitada- de que sólo la ciencia haría posible el mejoramiento gradual del mundo.
Esta confianza en el impacto que la técnica puede tener sobre lo cotidiano se remonta a Francis Bacon, para quien el control de la naturaleza representaba la más clara evidencia del poder de la inteligencia humana. Hoy en día,el positivismo suele relacionarse con una actitud que sólo valora el aspecto utilitario del conocimiento. Ello, a mi parecer, no es más que producto indirecto de la convicción -extendida en la modernidad y alcanzando incluso al socialismo- de que todo el conocimiento debe brindar beneficios materiales a la humanidad, y que ha de servirse, para ello, de la técnica, hija pródiga, tangible ehiperactiva de la metodología científica. Sin embargo, no hay que olvidar la influencia del contexto en toda cultura (religión, filosofía y ciencia incluídas). En el caso de Comte, éste estuvo influenciado por Saint-Simon, de quien recibió, entre otras cosas, el concepto de positivismo (como doctrina filosófica basada en la verificación de hecho positivos u observables), la concepción de las etapasorgánicas y críticas del conocimiento y la sociedad; la idea de que la ciencia tiene una capacidad de previsión utilizable y la pretensión de que el conocimiento ha de promover y posibilitar la reforma social.
En general, puede decirse que las críticas hacia el positivismo provienen, o bien de posturas conservadoras que ven en el positivismo el derrumbe de toda metafísica, y con ella, de todo criterioaxiológico o moral estable; o bien, de un humanismo hipersensible que considera que la reducción de la experiencia humana a teorías científicas hiere de algún modo la dignidad de la superioridad humana. En este último caso, que es al que me referiré a lo largo de este ensayo por considerar que es el más extendido en la comunidad filosófica, la crítica parte siempre de una ciega incomprensión queconsidera que el positivismo margina ciertas áreas de la realidad al absurdo –o a la falsedad o a la duda- por considerar que éstas no son susceptibles de verificación científica. En nuestros días, el positivismo es considerado un sistema filosófico que atenta contra la dignidad de las expresiones espirituales humanas y como una filosofía que ha propiciado la degradación de los ecosistemas y laexplotación sistemática y exagerada de los recursos naturales. Cosas todas ellas ciertas de alguna manera, pero que no pueden compararse con los principales beneficios del positivismo y que, por lo demás, estaban lejos de las concepciones esenciales de Augusto Comte.

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