Universitario
Fue uno de los seleccionados del Perú y Chile que conformaron el denominado Combinado del Pacífico[9] , integrado por futbolistas de los clubes Alianza Lima, Atlético Chalaco,Colo-Colo y Universitario de Deportes que entre septiembre de 1933 y marzo de 1934 disputaron 39 encuentros amistosos en Europa, siendo el goleador con 48 tantos.[9]
«Sus condiciones naturales era riquísimas: disparo violento y certero con ambos pies, cabeza privilegiada, visión de juego y capacidad para cambiar los frentes de batalla con sus pases largos y precisos a las puntas, valentía para entraral área, dureza para recibir golpes, fútbol sin complicaciones, funcional y hermoso en su recio estilo.»
Pancho Alsina.[10]
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1 Biografía
2 Trayectoria
2.1 Inicios
2.2 Etapa profesional
2.3 Retiro
3 Selección nacional
3.1 Participaciones internacionales
4 Clubes
5 Palmarés
5.1 Campeonatos nacionales
5.2 Copas internacionales
5.3 Distinciones Individuales5.4 Condecoraciones
6 Homenajes
7 Curiosidades
8 Récords
9 Véase también
10 Notas
11 Fuentes de consulta
11.1 Referencias
11.2 Bibliografía
12 Enlaces externos
[editar] Biografía
Teodoro Oswaldo Fernández Meyzán nació el 20 de mayo de 1913 en la Hacienda Hualcará en la localidad de San Vicente de Cañete.[11] Fue el antepenúltimo de los ocho hijos que tuvieron elmatrimonio formado por Don Tomás Fernández Cisneros (administrador de la hacienda) y Doña Raymunda Meyzán (ama de casa).[12] Estudió primaria en la Escuela Fiscal No.1510 de Hualcará, tras pasar casi toda su niñez en Cañete, Lolo fue enviado a Lima a los 16 años de edad para que continuara con sus estudios.[5] [13] Estuvo casado con Elvira Fernández Meyer, con quien contrajo matrimonio en 1937 y tuvodos hijos: Teodoro y Marina.[12] Lolo Fernández falleció en la Clínica Maison de Santé de Lima, el 17 de septiembre de 1996 a la edad de 83 años, y sus restos fueron sepultados en el Cementerio Parque del Recuerdo del Distrito de Lurín.[14]
[editar] Trayectoria
[editar] Inicios
En su niñez, Teodoro Fernández solía jugar al fútbol como cualquier otro niño de la hacienda, por aquel entonces sehacía muy complicado conseguir un balón y los niños se las arreglaban jugando con pelotas improvisadas o caseras.[15] A su padre no le agradaba que Lolo jugase al fútbol, pues decía que «su zapato derecho no le duraba nada y los izquierdos se quedaban nuevos».[15] Todas las tardes Lolo junto con sus hermanos y con los hijos de los trabajadores y peones de la hacienda se reunían para jugar en unapampa ubicada al lado de la capilla de la hacienda.[15]
«Mi padre estaba decidido a que no siguiéramos jugando. Mayor fue su oposición cuando se enteró que en el ardor del juego nos originábamos algunas lesiones que luego tratábamos de ocultar. Pensó que abandonaríamos el fútbol ocultándonos los zapatos. Sin embargo, nos escapábamos y llegamos a acostumbrarnos a jugar sin zapatos.»
Alberto...
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