Universitarios Analfabetos

Con frecuencia me toca seleccionar y reclutar profesionales, primordialmente abogados. Publico una convocatoria a través de las bolsas de trabajo de universidades como la de Guadalajara,Panamericana, el Iteso y el Tec de Monterrey. También lo hago a través de los sitios respectivos de Internet.

Durante años describí en tales convocatorias el perfil técnico que debía cumplir el candidato alpuesto vacante. Cuántos años de experiencia, en cuál área, si debía hablar inglés, el sexo y la edad, entre otros parámetros. Siempre fueron exitosos estos llamados, pues a cada uno atendían no menosde 40 personas que satisfacían las exigencias anunciadas. En muchas ocasiones quise contratar a más de una ante la interesantísima propuesta que significaban varias de ellas.

Sin embargo, ahoradoy cuenta de que cometía un grave error en esas convocatorias: jamás exigí que los candidatos deberían saber leer y escribir. Lo daba por hecho. Era de esperarse que después de 20 años de educaciónescolar cualquier candidato sabría leer y escribir. La realidad fue distinta.

Al requerirles que formularan por escrito, por ejemplo, una carta a un cliente, que leyeran un par de artículos de laley, los analizaran y luego con ellos resolvieran un caso, o bien, que definieran, a manera de concepto, algún hecho o alguna idea, resultaban incapaces de hacerlo. Una abogada no pudo definir lo queera una azucarera. En la vida de muchos de ellos no existen comas, puntos, signos de interrogación o de admiración. Los textos se escriben sin pausa, sin puntos y aparte, sin puntos suspensivos. Lospárrafos tampoco existen. Transformar las ideas en texto resulta una tarea más difícil que recitar todo el capítulo de las garantías individuales contenido en la Constitución General de la República.Para muchos de estos universitarios, de los que hoy producen no solamente las universidades, sino sus predecesoras en la educación de nuestros jóvenes, resulta extremadamente difícil darle orden y...